La empresa gallega Insitu Ingeniería, comenzará este martes por la mañana, 3 de mayo, con el georradar el rastreo de tres fincas del imputado por la desaparición de la compostelana María José Arcos, Ramiro V.G., que se encuentra en prisión desde el 8 de abril.

Está previsto que la inspección de campo se prolongue unos cuatro días para explorar tres áreas: una finca propiedad del imputado en Luou (Teo), un monte también de su titularidad y otro terreno junto a un cementerio abandonado.

Insitu ha explicado que, además de los cuatro días previsto de trabajo de campo, la tarea que realizará esta compañía coruñesa requerirá de unos 20 días más para interpretar los resultados en el laboratorio, por lo que prevé tener resultados de la búsqueda a principios de junio.

El dispositivo del georradar contará con agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil y personal del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga), que fueron, junto a Insitu, los encargados de fijar el plan de los trabajos con el aparato, que ejecutará un ingeniero de Insitu junto a las fuerzas del orden.

Fue el entonces juez del Juzgado de Instrucción Número 1 de Ribeira (A Coruña), ya que ahora se ha hecho cargo de la instrucción una jueza, quien autorizó el pasado día 15 de abril el uso del georradar para la búsqueda de restos humanos en fincas propiedad del imputado por un delito de asesinato en relación a la desaparición de María José Arcos hace quince años.

El uso de este aparato había sido reclamado por la familia de la desaparecida al considerar que el imputado pudo haber enterrado a María José Arcos, desaparecida desde 1996, en una de sus fincas.