La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha asegurado este lunes que "nunca se olvidará" el paso por la diócesis del cardenal Agustín García Gasco —fallecido este domingo en Roma—, ya que, "como arzobispo, marcó quizás la época de mayor esplendor de la Iglesia Valenciana".

La primera edil ha realizado estas declaraciones a preguntas de los medios tras asistir en la Catedral de Valencia a la Misa Pontifical con motivo de la festividad de San Vicente Ferrer, según han informado fuentes municipales.

Así, ha reconocido estar "tremendamente impresionada" por la muerte del religioso, que le fue comunicada el domingo, cuando estaba viendo precisamente el acto de beatificación de Juan Pablo II al que había acudido García-Gasco.

Barberá ha querido expresar sus condolencias tuvo a toda la diócesis y a la Iglesia Valenciana, además de a la propia familia del cardenal, que fue "un hombre con un empuje extraordinario", ha resaltado.

"Fue un gran pastor y el impulsor de la Universidad Católica de Valencia, así como una pieza clave en la visita del Papa a Valencia", ha rememorado. La alcaldesa ha recordado que en aquellas reuniones preparatorias para la llegada del Santo Padre, "era García-Gasco el que con su trabajo e ilusión arrastraba a todos los organizadores".

Asimismo, ha subrayado que, "al ser nombrado cardenal, devolvió el cardenalato a la diócesis de Valencia, que lo había perdido hace muchos años".

Finalmente, Rita Barberá ha recordado que, recientemente hace un par de meses tuvo la oportunidad de almorzar con el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y el propio García-Gasco con ocasión de 80 aniversario.