La Comunidad Autónoma Vasca se posiciona en cinco de los ocho indicadores seleccionados en la estrategia Europa 2020 en los niveles de la Unión Europea-27 o superiores, según datos elaborados por Eustat.

La Estrategia Europea 2020 fue puesta en marcha por la Comisión Europea en marzo de 2010, con el objetivo de salir fortalecidos de la crisis y preparar la economía de la Unión Europea de cara a la siguiente década.

La Comisión propuso como prioridades el crecimiento inteligente (desarrollo de una economía basada en el conocimiento y la innovación), el crecimiento sostenible (promoción de una economía que haga un uso más eficaz de los recursos, que sea más verde y competitiva) y el crecimiento integrador (fomento de una economía con alto nivel de empleo que tenga cohesión social y territorial).

Para definir el lugar que se quiere ocupar en 2020, estas tres prioridades se transformaron en cinco objetivos. El primero es que el 75 por ciento de la población europea de entre 20 y 64 años debería estar empleada, el segundo que el gasto interno en I+D debería alcanzar el 3 por ciento del PIB y el tercero que debería alcanzarse el objetivo "20/20/20" en materia de clima y energía (reducir las emisiones de gases efecto invernadero en un 20%, ahorrar un 20% del consumo de energía y promover el consumo de energías renovables hasta el 20%).

El cuarto objetivo es que el porcentaje de abandono escolar debería ser inferior al 10 por ciento y al menos el 40 por ciento de la generación más joven debería tener estudios superiores completados y el quinto y último es que el riesgo de pobreza en la UE debería amenazar a 20 millones de personas menos.

Según ha explicado Eustat, el seguimiento se hace a través de ocho indicadores principales, que son los que se han elaborado y recopilado para la Comunidad Autónoma Vasca.

Euskadi, con respecto a la media de la Unión Europea, registra valores mejores o similares en cinco de estos indicadores: Intensidad energética de la economía, Tasa de abandono escolar prematuro, Nivel de educación superior, Población en riesgo de pobreza o exclusión y Gasto interno en I+D.

Para el resto de ellos, los valores están por debajo de la media europea. Respecto al conjunto del Estado, sin embargo, todos excepto dos, -la Cuota de energías renovables y el porcentaje de población que vive en hogares con intensidad de trabajo muy baja-, arrojan cifras mejores para Euskadi que para el conjunto de España.

La Intensidad energética es un indicador que mide la dependencia del crecimiento del PIB con respecto al consumo de energía y en qué medida se usa eficientemente, por lo que una cifra más baja indica menos contaminación ambiental y destrucción de recursos.

La Tasa de abandono escolar prematuro de la población de 18 a 24 años y el Nivel de educación superior de la población de 30 a 34 años no sólo ofrecen mejores resultados comparativos, sino que para el conjunto de las mujeres se superan los objetivos fijados por la UE (menos del 10% y al menos el 40%, respectivamente). También se alcanza el objetivo para el total de la población para el nivel de educación superior.

Riesgo de pobreza o exclusión

En cuanto al indicador Población en riesgo de pobreza o exclusión, Euskadi registra tasas más favorables que la media de la Unión Europea, casi cuatro puntos por debajo en el caso del indicador agregado de Riesgo de pobreza o exclusión, que afectaría al 19,3 por ciento de la población vasca frente al 23,1 por ciento de la europea en su conjunto y al 23,4 por ciento de la española.

La Tasa de ocupación de la población de 20 a 64 años ofrece cifras ligeramente inferiores a la media europea, del 68,5 por ciento para Euskadi frente al 69,1 por ciento europeo, y a seis puntos y medio del objetivo (75%).

En el lado menos positivo, dos indicadores, ambos en el apartado climático, dan cifras peores que la media de la UE-27: las Emisiones de gases de efecto invernadero, con un índice de 120,6 frente al 88,7 de la UE-27 para 2008, y la Cuota de energías renovables en el consumo final bruto de energía, que representa el 6,5 por ciento en el caso de Euskadi y alcanza el 10,3 por ciento para la media europea.

No obstante, Eustat ha destacado que los datos de 2009 arrojan una mejora en ambos indicadores, ya que el primero se sitúa en 108,0 y el porcentaje de renovables alcanza el 7,4 por ciento.