Es la infraestructura más compleja de las que se han construido en Euskadi. Habrá que excavar dos túneles en cada dirección de 8,5 km, 17 km totales. En esa primera fase, el 70% del trazado será subterráneo. Ello elevará el coste total a los 1.300 millones de euros. La excavación de los túneles será la parte más espectacular.

Túneles con voladuras

Según explicó ayer el diputado de Obras Públicas, Eusebio Melero, habrá que realizar voladuras para excavar la roca. Se avanzarán 8 metros al día en las zonas duras, la mayoría, y 32 en las blandas.

La Variante Sur Metropolitana, que enlazará la A-68 con la autovía del Cantábrico, abrirá su primer trazado en 2011. Absorberá 40.000 vehículos al día de la A-8 y evitará los atascos.

El calendario

Primavera 2007: Empiezan las obras en los tramos Trapagaran-Gorostiza-Cadagua-Peñascal y Larraskitu. 12 kilómetros en total. Su coste será de 408 millones.

Primavera 2008: Se inician las obras de los enlaces de Portugalete, Ortuella, Trapaga y Corredor de Cadagua.

Primavera 2009: Prosigue la obra con fases más alejadas: Santurtzi-Portugalete-Trapagaran y Larraskitu-Buia.

Marzo 2011: Estarán en marcha estos tramos.

20120-2015: Se construye la segunda fase entre el Peñascal y Venta Alta.

Las viviendas más afectadas

No todos los túneles de la Supersur se harán con explosiones. Para evitar complicaciones con la dinamita en zonas residenciales, el tramo entre Peñascal y Larraskitu se hará por medio de máquinas rozadoras. Habrá otras zonas que se verán afectadas por las obras. Las más reseñables son el nudo viario entre Trapagaran y Portugalete, donde también hay algunas viviendas, o en el enlace del Cadagua. El proyecto también paliará el impacto ambiental de las obras en el trazado.