El presidente y secretario general del Consejo Aragonés de Cámaras de Comercio e Industria, Manuel Rodríguez, ha presentado este martes, en el campus de Huesca de la Universidad de Zaragoza, el estudio 'Análisis, diagnóstico y propuestas de mejora del turismo en Aragón: del turismo como riesgo a la oportunidad de un turismo sostenible', un informe que concluye con la necesidad de la Comunidad autónoma de crear una imagen de marca única para potenciar el turismo.

El documento, elaborado por las Cámaras de Comercio y por la Escuela Universitaria de Empresariales de Huesca, señala que Aragón tiene todos los recursos naturales, culturales, histórico-artísticos, infraestructuras hoteleras e inversión económica que necesita para que el turismo sea una actividad lucrativa en la Comunidad.

Sin embargo, estas ventajas "están dificultando establecer una imagen única y obstaculizan la creación de una imagen promocional que muestre a Aragón como un destino turístico identificable y elegible en el extranjero", puntualiza el informe. Por ello, los autores apuntan que es necesario mejorar ciertos aspectos de la promoción, utilizando como reclamo una marca única, junto a un eslogan atractivo e identificable en Europa.

En este sentido, los realizadores del informe señalan que el Pirineo aragonés sí que empieza a ser reconocido e identificado como destino en los mercados turísticos, tanto nacionales como internacionales. Ante esta apreciación, las Cámaras de Comercio plantean la posibilidad de que a través de la marca del Pirineo se atraiga a turistas cuyo objetivo no sea sólo el turismo de nieve y montaña.

"A partir de ese análisis se pueden tomar decisiones para conseguir la máxima eficiencia de la política de promoción y gestión turística, en la que se invierten notables recursos económicos", ha asegurado Manuel Rodríguez. La investigación también señala que se está produciendo un aumento muy significativo en el turismo rural, cultural y religioso bajo el paraguas del turismo de naturaleza.

Perfil del visitante

Según el estudio, el viajero que visita Aragón es mayoritariamente de origen nacional procedente de las tres grandes ciudades españolas —Madrid, Barcelona y Valencia—, tiene entre 30 y 40 años y viaja acompañado. El tiempo que pasa en la Comunidad es de tres a siete días, se centra en el turismo de naturaleza y gasta de 30 a 60 euros diarios.

La mayoría de los visitantes buscan la información turística y el alojamiento a través de Internet. Además, el turista que viene a Aragón lo que pretende es establecer relaciones humanas próximas en entornos culturales, religiosos y rurales en los que la comunicación es mucho más estrecha.