Las obras de restauración de la iglesia de Híjar, cerrada desde 2007 ante los riesgos de desprendimiento, podrían comenzar tras el verano. Al menos es lo que se desprende de un encuentro mantenido entre representantes del Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de la localidad que, en las últimas fechas se había mostrado partidario de adelantar el pago de los trabajos, después de que el Ejecutivo autónomo hubiera suspendido, por cuestiones presupuestarias, el inicio de las obras previstas para el año pasado.

El alcalde de Híjar, Luis Carlos Marquesán, ha afirmado que "parece que estamos desatascando el problema" o al menos, todo apunta a eso, después de la reunión que "hemos tenido con el consejero de Obras Públicas, Alfonso Vicente, para estudiar la propuesta que hemos remitido desde el ayuntamiento de adelantar el dinero nosotros".

Según ha explicado Marquesán, "se nos ha hecho ver que, por cuestiones presupuestarias y de legalidad, el Gobierno de Aragón no puede firmar esos convenios porque tiene que sacar una convocatoria pública". De esta forma, según el acuerdo verbal alcanzado, "el Gobierno de Aragón haría una licitación anticipada de las obras para que se pudieran adjudicar este verano" e incluso, se ha indicado que "dentro de las mejoras que se planteasen en la contratación se pueda incluir una como inicio anticipado de las obras". De esta forma, los trabajos podrían comenzar el próximo mes de septiembre.

Además, Marquesán ha señalado que no sólo se arreglará la iglesia, sino que "también solventaríamos los problemas que están teniendo los vecinos con los desprendimientos de piedra de los muros colindantes". En las últimas semanas varios vecinos de la zona han denunciado problemas en sus casas, con desprendimientos de rocas, a causa de las humedades que se registran en un muro de la Iglesia.

En este sentido, el alcalde ha comentado que, de momento no se ha apuntalado porque "el muro se desprende como consecuencia de la humedad, pero es una zona de muy difícil acceso". El problema sólo se puede solucionar colocando un andamio y consolidando todo el muro, pero "los técnicos tendrán que determinar si es de tal urgencia que hay que actuar inmediatamente o si se puede esperar hasta después del verano e incluirlo en la restauración de la iglesia".

En octubre de 2009, el Gobierno de Aragón dio el visto bueno a un proyecto de rehabilitación del templo, cuyo coste ascendía a 728.100 euros, de los que el Departamento de Obras Públicas aportaría el 80 por ciento y el Ayuntamiento de Híjar y el Obispado el resto a partes iguales.

En dicho proyecto se incluían trabajos en la cubierta, las fachadas y las bóvedas del templo cuyo principal problema es la falta de estabilidad.