El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número uno de Morón de la Frontera (Sevilla), en el marco de un juicio celebrado a cuenta de una denuncia por injurias promovida por el propio alcalde de dicho municipio, Manuel Morilla (PP), ha deducido testimonio y, a petición de la defensa, ha trasladado a la Fiscalía los hechos relativos a las obras acometidas en el cortijo que el primer edil y su esposa comparten. Como es sabido, el propio Consistorio ha ordenado la "demolición completa" de una vivienda, una construcción secundaria anexa a la piscina y de las obras de ampliación consumadas sobre una segunda vivienda de este cortijo, al exceder los trabajos la licencia de obras concedida 1 de marzo de 2004 sencillamente para la "rehabilitación" de una casa de campo.

La Fiscalía de Medio Ambiente, Urbanismo y Patrimonio Histórico de Sevilla, a cuenta de una denuncia promovida por el grupo independiente Asamblea Moronera Alternativa (AMA-Morón), había atisbado ya un posible delito contra la ordenación del territorio en las obras acometidas en la finca Zafra bajo la licencia de obras solicitada al Ayuntamiento de Morón de la Frontera por la propia esposa del alcalde, Ana F.V. No obstante, el Ministerio Público había esgrimido la prescripción de los hechos en cuestión, a la hora de archivar las diligencias incoadas contra el primer edil de Morón, su cónyuge y el arquitecto municipal, sobre cuyos actos resolvía que es "indiscutible" que los trabajos superan "notoriamente" lo autorizado.

Solicitud de licencia

En concreto, la esposa del alcalde de Morón de la Frontera solicitó, en febrero de 2004, una licencia de obras al Ayuntamiento con destino a la "rehabilitación de una casa de campo" en la finca Zafra, propiedad de esta familia. A tal efecto, el 1 de marzo de 2004, un decreto de Alcaldía otorgaba la correspondiente licencia de obras al objeto de la "sustitución de la cubierta —forjado y faldones— de dos viviendas existentes en el cortijo", dado que un informe previo del arquitecto municipal advertía de que, merced a las normas subsidiarias urbanísticas de Morón de la Frontera, tales suelos solo pueden acoger "obras de conservación y mejora".

Una propia inspección cursada posteriormente por el arquitecto municipal derivó en un informe emitido el 17 de febrero de 2010 con la advertencia de que "las obras realizadas exceden de la licencia concedida debido a que se han llevado a cabo obras en la totalidad del cortijo y, si bien la superficie ocupada por la edificación principal es similar a la preexistente, se han realizado obras en zonas del caserío que van más allá de la simple rehabilitación o conservación, pues se detecta estructuras de reciente construcción que hacen suponer que se ha procedido a la demolición y nueva planta".

Tal situación, de hecho, motivó que el propio Ayuntamiento de Morón de la Frontera incoase contra la esposa del alcalde un expediente de restablecimiento de la legalidad urbanística. Dicho procedimiento, a través de una resolución recogida por Europa Press, concluye que las obras exceden la licencia otorgada el 1 de marzo de 2004 para la "rehabilitación de una casa" de campo en la finca zafra

El expediente, así, insta a Ana F.V. a legalizar la sustitución de las cubiertas del almacén y del cuerpo principal de la nave, resolviendo la "reposición de la realidad física alterada con la demolición completa" de la vivienda número uno, la "ampliación" de la vivienda número dos o de los guardas y de la "construcción secundaria anexa a la piscina". El expediente, finalmente, estipulaba un periodo de dos meses para consumar las actuaciones ordenadas con la advertencia de la imposición de "multas coercitivas o la ejecución subsidiaria" a manos del Ayuntamiento en el caso de no ser cumplido el contenido del documento.

Pues bien, el pasado 15 de febrero de 2010, el alcalde había formulado una denuncia por una posible falta de injurias contra un particular de Morón de la Frontera a cuenta de la distribución de un panfleto que reflejaba una fotografía aérea del cortijo en cuestión con la leyenda: "Nuevo caserío cortijo de Zafra. Para esta obra que vale más de 700.000 euros, el señor Morilla pidió una licencia de remodelación cuyo presupuesto era de 54.750 euros".

El pasado 11 de marzo de 2011, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número uno de Morón de la Frontera celebró la vista oral correspondiente a esta denuncia. La sentencia de la citada instancia judicial, recogida por Europa Press, absuelve al denunciado porque "no constan acreditados los hechos denunciados", además de que no había comparecido la parte denunciante. Dado que durante la celebración de la vista oral la defensa había reclamado que se dedujese testimonio de la causa "por si los hechos son constitutivos de un delito de prevaricación", la citada instancia judicial resuelve en su sentencia absolutoria "deducir testimonio de la presente causa y darle traslado de ello al Ministerio Fiscal".