Cantabria registró en los dos primeros meses del año 871 accidentes laborales con baja, lo que supone un descenso del 12 por ciento con respecto al mismo periodo de 2010 y mantiene la senda descendente que se observó a lo largo de todo el pasado año.

En enero y febrero no hubo accidentes mortales (uno en el mismo periodo de 2010) y sólo se registraron cuatro de carácter grave, frente a los once contabilizados los dos primeros meses del pasado año.

Por su parte, los accidentes leves disminuyeron de los 974 de enero y febrero 2010 a los 867 registrados en esos mismos meses de 2011, según datos del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo, recogidos por Europa Press.

Por sectores, los servicios concentran el 49 por ciento de la siniestralidad laboral en Cantabria, con 428 accidentes entre enero y febrero. A continuación se sitúa la industria, con 258 (el 29,6%), y después la construcción, con 147 accidentes (el 16,8%).

En último lugar se encuentra el sector agropecuario y pesquero, que representa el 4,3 por ciento de los siniestros laborales (38 en el periodo analizado).

Ese reparto de los accidentes laborales por sectores se repite en el caso de los siniestros leves, donde los servicios vuelve a concentrar el mayor número de partes, pero cambia en el caso de los accidentes graves. Así, de los cuatro siniestros graves ocurridos en enero y febrero, dos fueron en la construcción, uno en la industria y otro en el sector agropecuario.

Comparado con el mismo periodo de 2010, todos los sectores han reducido su siniestralidad, menos el agrario. El mayor descenso se observa en la construcción, con una disminución del 21 por ciento. En los servicios, por su parte, el descenso fue del 9 por ciento, y en la industria del 14 por ciento.

En cambio, en el sector agropecuario y pesquero aumentó un 23%, al pasar de los 31 accidentes registrados en enero y febrero de 2010 a 38 siniestros en los mismos meses de este año.