Agentes del Equipo de Investigación Tecnológica (EDITE) de la Guardia Civil de Cantabria han imputado a un joven de Alicante como presunto autor de un delito de abuso sexual a una menor residente en Cantabria, a través de Internet.

Según informa el instituto armado en nota de prensa, la Guardia Civil tuvo conocimiento de los hechos en octubre del pasado año, cuando se supo que una menor de Cantabria había mantenido conversaciones a través de Messenger con un joven que decía tener 17 años.

Al parecer, en esas conversaciones el joven le pedía a través de la web-cam que se desnudara y realizara otras acciones de índole sexual mediante engaño, llegando incluso a ofrecer a la chica recargarle el teléfono móvil.

Una vez que el EDITE de la Guardia Civil de Cantabria se hizo cargo de la investigación y tras múltiples gestiones, llegó a la conclusión que todas las conexiones de Internet del presunto autor habían sido realizadas desde un domicilio de Alicante.

Gestiones posteriores llevaron a señalar como supuesto responsable de los hechos al hijo del titular de la línea de Internet del domicilio de Alicante, así que el joven ha sido imputado como supuesto autor de un delito de abuso sexual por Internet.

Consejos para internautas

A raíz de este nuevo suceso en Internet, la Guardia Civil de Cantabria recuerda a los padres que se debe animar a los hijos al uso de las nuevas tecnologías, pero no al abuso. Por eso, aconseja limitar las horas que los menores pasan frente al ordenador o conectados a Internet.

También recomienda supervisar los contenidos a los que accede y que el equipo informático esté en un lugar de la casa que pueda ser supervisado por los padres mientras los hijos navegan por la red. Igualmente, señala que existen programas que filtran el acceso a determinados contenidos.

La Guardia Civil señala que los principales riesgos en Internet para los menores son el fraude y la provocación sexual, por eso, anima a los padres a explicar a sus hijos que no deben proporcionar datos personales, ni nombre, ni direcciones ni horario de colegios, ni tampoco establecer citas reales con nadie sin su conocimiento.

Igualmente, desaconseja contactar por Messenger con personas que no se conozcan en la vida real y pide que si los hijos avisan a los padres de contenidos que le han hecho sentir incómodos (de tipo sexual) les den la importancia que realmente tienen y lo denuncian.