Imputados dos ganaderos de Los Palacios por maltrato animal al tener al ganado desnutrido y sucio

Agentes de la Guardia Civil de la patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Lebrija (Sevilla), con la colaboración del Área Ganadera de la Oficina Comarcal Agraria del Bajo Guadalquivir, han imputado a dos ganaderos de Los Palacios y Villafranca por un supuesto delito de maltrato animal, pues tenían al ganado desnutrido y sucio.
Maltrato animal
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EUROPA PRESS/GUARDIA CIVIL
Maltrato animal

Agentes de la Guardia Civil de la patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Lebrija (Sevilla), con la colaboración del Área Ganadera de la Oficina Comarcal Agraria del Bajo Guadalquivir, han imputado a dos ganaderos de Los Palacios y Villafranca por un supuesto delito de maltrato animal, pues tenían al ganado desnutrido y sucio.

En un comunicado de prensa, el Instituto Armado ha informado de que el Seprona de Lebrija tuvo conocimiento, por varias llamadas anónimas, de que en una finca ubicada en Los Palacios existía una explotación ganadera en la que los animales estaban en estado de abandono.

Al lugar, se desplazaron guardias civiles de la patrulla de Lebrija, que observaron cómo había ganado equino y bovino en un estado "lamentable", ya que los animales se encontraban "desnutridos". Además, no había comida ni agua en los establos y el agua se encontraba mezclada con excrementos que llegaban a los animales por encima de las pezuñas.

Los agentes realizaron gestiones para localizar a los propietarios de la explotación, e incluso contactaron con los vecinos de las fincas colindantes, pero éstos, "por temor", se negaron a dar datos. Tras ello, se realizaron gestiones con la Oficina del Área Ganadera de la Oficina Comarcal del Bajo Guadalquivir y los agentes del Seprona llegaron a conocer quienes eran los titulares de la explotación.

Además, se supo que solo tenían autorización para una explotación ganadera equina, no bovina, por lo que se incurriría en una falta muy grave. Así, se realizó una nueva inspección higiénico-sanitaria, esta vez con los técnicos de la Oficina Comarcal, y los veterinarios confirmaron el mal estado de los animales.

Según los veterinarios, el mal estado de los animales se debía a la falta de alimentación y de cuidados, así como a las "deficientes" instalaciones. Por estos hechos, se imputó a los propietarios de la explotación por un supuesto delito de maltrato animal, tipificado en el artículo 337 del Código Penal.

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