El secretario de Organización del PSOE malagueño y número seis de la candidatura socialista en Málaga capital, Francisco Conejo, ha solicitado al alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, que cese de sus funciones a la concejala de Sostenibilidad y Servicios, Teresa Porras, tras la polémica sobre las contrataciones en las áreas que dirige.

El socialista ha exigido a De la Torre que "no mire para otro lado" y ha dicho que el regidor es "el responsable último de todo cuanto pase en el Ayuntamiento". "El descontrol se ha instalado en el Ayuntamiento de Málaga con el consentimiento y el aval público de Francisco de la Torre", ha afirmado en rueda de prensa.

"No queremos pensar que el Consistorio es una verdadera maquinaria económica al servicio de una red de empresas, conectadas o sin conectar, vinculadas al PP o a los concejales del equipo de gobierno", ha manifestado Conejo.

En este punto, ha anunciado que los servicios jurídicos del PSOE de Málaga "están ya analizando toda la información" del que ha denominado 'caso Porras'. "Vamos a pedir más información e informes en el Ayuntamiento", ha añadido.

"Por sus obras los conoceréis, se dice, y en Málaga por sus escándalos los conoceréis", ha sentenciado Conejo, en referencia a otras polémicas como los contratos en el Área de Turismo, el de Marmolejo, el 'caso Piscinas', el 'caso Díaz, y éste afecta a Teresa Porras.

A juicio del socialista, la honestidad del alcalde de la capital "está tocada", y se ha preguntado "si es honesto apoyar que tu concejal de Urbanismo —Manuel Díaz— eluda pagar lo correspondiente por la licencia de obra de su casa y apoyar que tu teniente alcalde adjudique a dedo 28 contratos de mantenimiento de los parques infantiles a una dirigente local del PP".

Conejo, ha insistido en que en la polémica de Porras "estamos hablando de hechos probados". "No estamos ante una interpretación de la ley, ante una mala praxis de la adjudicación a dedo: estamos ante un amiguismo empresarial y un clientelismo político con importantes consecuencias", ha asegurado.

Ha continuado afirmando que se trata de un caso "de contratos a dedo con un barniz de libre competencia que no era tal pues las empresas pertenecían a las mismas personas". "Son datos exactos, hechos, no interpretaciones", ha reiterado, al tiempo que ha criticado que Porras "haya tardado 48 horas en dar explicaciones".