Tres hombres vestidos con el equipo de protección individual (EPI) caminan por las desérticas calles de la zona comercial de Shanghái.
EFE/ALEX PLAVEVSKIDos jóvenes buscan algunos productos entre los estantes vacíos de un supermercado, en Pekín. Las imágenes se suceden en las grandes ciudades del país, con problemas de suministro y un bloqueo marítimo que preocupa a autoridades y ciudadanos.
EFE/MARK R. CRISTINOUna mujer observa desde el balcón de su hogar durante el confinamiento de la ciudad de Shanghái. Las autoridades sanitarias obligan a permanecer en los domicilios en su persecución por reducir el empuje de ómicron en China.
EFE/ALEX PLAVEVSKILos ciudadanos caminan junto a un bloqueo de carreteras y un puesto de diagnóstico covid improvisado durante el cierre de la ciudad de Shanghái.
EFE/ALEX PLAVEVSKIUna mujer se somete a un test covid en un puesto improvisado de diagnóstico en el centro de Pekín. Miles de ellos se suceden a lo ancho y largo de la ciudad. Se pide no salir ante el festivo 1 de mayo.
EFE/MARK R. CRISTINOUn ciudadano acude a un puesto de entrega de alimentos durante el cierre de la ciudad en Shanghái.
EFE/ALEX PLAVEVSKILos ciudadanos llevan mascarilla en el interior de las estaciones de metro, en Pekín.
EFE/MARK R. CRISTINOChina está viviendo una nueva pesadilla a consecuencia de la covid, por un bloqueo que sufre el país. La escasa movilidad que hay, para ir al trabajo o la escuela, deja imágenes sin apenas personas, con mascarillas.
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