Según informó el Consistorio, se trataría así de continuar lo realizado en los últimos años y que ha tenido su última entrega a principios de este año con la colocación de chapas lacadas y serigrafiadas sobre las actuales pantallas acústicas ya existentes en el acceso a la A-8 desde este municipio, mejorando así el aspecto visual de estas pantallas.

Los motivos serigrafiados han buscado mimetizar un bosque, en un trabajo que fue impulsado por Diputación foral de Bizkaia y el Ayuntamiento de Galdakao

Con este trabajo se ha mantenido la línea iniciada poco después de abrirse este acceso, en febrero de 2007, cuando se aprovechó una parte del trazado de pantalla acústica en hormigón para decorarlo con motivos similares a los utilizados en el túnel de Begoña, realizados por el mismo autor.

En este caso, los últimos trabajos se han llevado a cabo a lo largo de 270 metros lineales, que abarcan la entrada a la autopista A-8. Sobre cada pantalla metálica existente, que mide cuatro metros de alto por otros tantos metros de ancho, se ha colocado una chapa lisa de recubrimiento de 0,5 milímetros unida a la valla existente con remaches.