El Gobierno de Navarra ha vendido en los últimos meses cinco viviendas y tres pinturas, el 80% de los bienes disponibles, procedentes de herencias de personas navarras fallecidas sin testar en los últimos años. Por la venta del conjunto de bienes se han obtenido 391.441,5 euros que, una vez restados los gastos correspondientes, irán destinados a entidades sociales.

Este proceso de venta se puso en marcha a través de Portal de Contratación. El listado completo de los bienes estaba compuesto por cinco viviendas en Pamplona; una en Tafalla; una pintura del artista navarro Jesús Basiano; una obra del pintor irundarra Gaspar Montes Iturrioz; y dos del madrileño Antonio Pérez Rubio.

En una primera fase del proceso fueron adjudicadas, mediante subasta, dos viviendas en la calle San Antón de Pamplona por 58.550 euros y 54.962,50 euros. De conformidad con lo establecido en el Pliego de Condiciones de la subasta, el Servicio de Patrimonio anunció la apertura de un plazo de 2 meses, desde el día 29 de abril hasta el día 29 de junio de 2014, para la presentación de ofertas para la enajenación directa de los lotes no adjudicados.

Recibidas y analizadas dichas ofertas, ha detallado el Gobierno foral en un comunicado, han sido adjudicados los siguientes bienes en orden a su cuantía económica: una vivienda en la avenida Baja Navarra 14 (Pamplona), por un importe de 171.171 euros; vivienda de la calle Jarauta, 73-75 (Pamplona), por 56.695 euros; y una vivienda en la calle Guelbenzu, también de la capital navarra, por 44.102 euros.

También se han adjudicado una pintura de Montes Iturrioz, por un importe de 4.877 euros: una pintura de Pérez Rubio por 542 euros y otra obra del mismo artista por la misma cantidad de dinero.

Herencias ab intestato

Estos bienes provienen de 12 personas fallecidas sin testar entre 1995 y 2008 (herencias ab intestato) que vivían en las localidades de Pamplona, Estella, Cascante, Lumbier y Falces. Según el Derecho Civil Foral de Navarra, la Comunidad es la sucesora de los bienes de las personas que hayan fallecido sin familiares cercanos ni haber declarado herederos. A su vez, debe repartir los beneficios de estos bienes entre entidades sociales.

Una vez realizada la subasta, el Gobierno de Navarra restará a la cantidad obtenida los gastos que haya provocado el mantenimiento de los inmuebles (gastos de comunidad, derramas, etcétera). La cantidad resultante se repartirá entre las entidades benéficas según los criterios establecidos.

El pasado mes de noviembre el Gobierno de Navarra abrió una convocatoria para seleccionar las entidades benéficas que recibirán los beneficios de esta subasta.