Los peregrinos y turistas que estos días visitan la cuidad de Santiago de Compostela viven con asombro la historia del robo y recuperación del Códice Calixtino de la Catedral compostelana, una historia que califican de "increíble" y que, en opinión de muchos, debería terminar en la exposición pública de la pieza.

Así lo han señalado a Europa Press, entre otros, Juan Vázquez y Rosa Otero, un matrimonio de Granada que estos días visita la capital gallega y que se han mostrado "sorprendidos" por las circunstancias de localización de la pieza, en un garaje de la vecina localidad de O Milladoiro.

"Es como una película", ha explicado Rosa Otero, quien ha admitido que en su momento imaginó que el Códice Calixtino había sido robado "por un cura" y que su sustracción obedecía a algún tipo de desavenencia en la Iglesia compostelana. "¿Quién se podía imaginar que había sido un electricista?", ha sentenciado.

En la misma línea se ha manifestado Juan Vázquez, quien ha reconocido que el Códice Calixtino, que era "desconocido para muchas personas" hasta ahora, ha alcanzado grandes niveles de popularidad con su hallazgo. "Habrá mucha gente que quiere verlo, que tiene curiosidad, deberían exponerlo", ha sentenciado.

El dinero

Un grupo de jóvenes peregrinos procedentes de Italia se han mostrado favorable también a la exposición. Tras asegurar que hasta su robo no conocían la existencia del Códice, han calificado de "muy extraña" la historia de su hallazgo y, en particular, se han referido a las importantes cantidades de dinero que el acusado tenía en su poder.

La procedencia del dinero es un asunto que extraña a numerosos visitantes de la capital gallega, como es el caso de Manuel García, peregrino originario de Madrid, que ha mostrado, en declaraciones a Europa Press, su sorpresa al conocer la cantidad de dinero que atesoraba en casa el principal acusado. "¿De dónde venía? ¿Por qué nadie lo denunció?", ha cuestionado.

Los turistas y curiosos que rodean la Catedral de Santiago también aprovechan la presencia de numerosos periodistas en la zona para cuestionar sus dudas acerca del hallazgo. "¿Hay novedades?", ha preguntado una mujer procedente de Guadalajara y que ha asegurado estar "enganchada" a la actualidad del caso, cuya resolución ha coincidido con sus vacaciones de 10 días por las tierras gallegas.

En el caso de María Alonso, otra turista en la capital gallega, la preocupación es que pueda ver el Códice Calixtino expuesto antes de volver a Cataluña, su lugar de residencia. "Me gustaría verlo, después de toda esta historia, sobre todo porque ahora será más difícil acceder a el, tendrá más medidas de seguridad", ha indicado, "quizás nunca más pueda verse en público".