El Ayuntamiento de Logroño trasladará la Unidad de Convivencia, para protección de víctimas de violencia, y la de Atención Social de la comisaría de Villegas a la calle Ruavieja número 47, donde se habilitan unas dependencias individualizadas para el servicio en el patio de la Comisaría Central de Ruavieja.

Como ha explicado el concejal de Interior, Miguel Sáinz, la nueva ubicación "permitirá contar con un espacio más adecuado para este servicio especializado, aumentando el espacio destinado a la atención de víctimas y usuarios que pasará de 40 metros cuadrados en Villegas a 55 metros cuadrados en Ruavieja".

Ha incidido en que "se mejora además la intimidad y discreción con que las víctimas venían siendo atendidas hasta la fecha", ya que, según ha apuntado, "en las actuales instalaciones de Villegas, diseñadas para comisaría de barrio, la unidad dispone de un espacio diáfano de apenas 40 metros cuadrados compartimentado por mamparas en el que se hacen las entrevistas o diligencias de carácter reservado inherentes al servicio".

"Durante estos años, y entre las mamparas, se podía estar interviniendo a la vez con una mujer maltratada, un menor con problemas de absentismo escolar o incluso otro agresor en un asunto de violencia familiar o de género. Tenían que hablar en voz baja para que no se oyera lo que contaban en la zona contigua", ha subrayado Sáinz.

Por contra, en las nuevas instalaciones de Ruavieja, "en las que se ha pintado y mejorado la luz existente, con más luz natural, lo que no ocurría en Villegas", las víctimas ganarán "en tranquilidad y confidencialidad en espacios específicos e individualizados para ellas".

El cambio de ubicación, previsto para el 15 de octubre, supondrá asimismo que las instalaciones de Villegas se destinarán únicamente a la futura Comisaría de Distrito, con la previsión de que "se vuelva a abrir y, por tanto, se vean más uniformes en las calles de esta zona" a partir de finales de este mismo mes, después de realizar "unas pequeñas obras" de acondicionamiento. PLANTILLA.

Sáinz ha recalcado que las unidades estás integrada en total por 1 inspector y un 1 subinspector, "que son los que dirigen los servicios"; 3 oficiales -2 en Convivencia y 1 en Atención Social- y 13 agentes -9 en Convivencia y 4 en Atención Social-.

En concreto, la Unidad de Convivencia se dedica a la protección víctimas de violencia intrafamiliar y de género, mientras que el servicio de Atención Social se centra en la intervención en el ámbito de menores, conflictos familiares y atención a la tercera edad.

El concejal de Interior ha negado que, como ha criticado el PSOE esta mañana, se haya dado un recorte en las plantillas de esas unidades, como también ha rechazado la acusación de que estos agentes se habrían destinado a tareas de seguridad del equipo de Gobierno y la alcaldesa.

Así, ha explicado que "nosotros encontramos una plantilla con 1 inspector, un subinspector, cuatro oficiales y 14 agentes; ahora, se han quedado en 3 oficiales y 13 agentes, una plantilla adecuada, como reconocen los mismos policías, ya que los oficiales, que antes se dedicaban a temas más organizativos, ahora están más implicados en vigilancias y protección de víctimas".

Respecto a su destino, ha recordado que "está pendiente una profunda reestructuración de la Policía Local", por lo que tanto estos dos puestos, como los tres que se han reducido de la plantilla de escoltas, "han ido al núcleo principal del cuerpo, que va a ser redistribuido", sobre todo para destinarse a policía de barrio.

DATOS.

Por otro lado, Sáinz ha ofrecido los datos de actuación de los dos grupos en el último año. Sobre la Unidad de Convivencia e Intermediación, ha aclarado que "su función es proporcionar a las víctimas de violencia de género e intrafamiliar de la ciudad, la protección inherente a su nivel de riesgo, en estrecha coordinación con Policía Nacional, Juzgados, Oficina de Atención Victima y Servicios Sociales".

A día de hoy, la Unidad de Convivencia de la Policía Local ofrece protección a 49 mujeres con riesgo medio y 5 con riesgo alto, "y a ninguna de riesgo elevado, aunque en algún momento se ha protegido hasta a 3 mujeres". El resto de mujeres con riesgo bajo o no apreciado, "en torno a 200", son atendidas por Policía Nacional.

También se realizan vigilancias periódicas en el domicilio, lugar de trabajo de la víctima o entradas y salidas de centros escolares de sus hijos. También la acompañan en actuaciones de carácter judicial o asistencial. Durante el pasado año 2010 se sumaron hasta 1.580 actuaciones de vigilancia o acompañamiento a víctimas.

Por último, los policías comprueban el cumplimiento de las medidas judiciales que pesan sobre el agresor, de tal modo que 130 agresores controlados en el 2010 con 12 detenciones por quebrantamiento de condenas y órdenes de protección o alejamiento, realizando contactos con personas del entorno del agresor y de la víctima.

Respecto al Grupo de Atención Social, Sáinz ha dicho que "interviene en el campo de menores, atención a la mujer, intervenciones en violencia familiar y ancianos".

El año pasado realizaron 27 intervenciones en el ámbito de la violencia familiar incrementándose el número de situaciones provocadas por menores hacia sus padres, 19 del total. Intervinieron en 122 ocasiones por problemas derivados de situaciones de ruptura de convivencia de parejas principalmente problemas derivados del régimen de visitas.

A ello ha unido que "este grupo realiza un trabajo especial con los menores en el ámbito de la protección de los mismos, e interviene tanto en el caso de que sean autores como víctimas de delitos o faltas". El año pasado realizó 424 intervenciones, en su mayor parte 177, con menores desatendidos o en riesgo de desamparo, o con problemas de absentismo escolar 78 intervenciones.