El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha reclamado este sábado que se "aproveche" el discurso y las propuestas de austeridad en las administraciones públicas para concretar las competencias que corresponden a cada administración y, además, la financiación necesaria para desarrollarlas.

Gallardón ha participado en el acto de inauguración del foro que el PP ha organizado este fin de semana en Zaragoza para debatir sobre austeridad en las administraciones, encuentro que clausurará este domingo el presidente del PP, Mariano Rajoy, y el segundo de los cuatro encuentros nacionales que celebrará antes de las elecciones y se ha anunciado que el próximo tendrá lugar en Valencia y se centrará en el empleo.

El alcalde de Madrid ha comentado como "vivimos en un tiempo de reformas, aunque el Gobierno no lo ha entendido", todos los países de Europa están acometiendo reformas "y ese será el gran reto del nuevo Gobierno de Rajoy si todos los ciudadanos nos dan su confianza".

Mientras que en Europa "se afronta la contención del gasto público, en España además de esa medida está pendiente una reforma más profunda y de carácter estructural que tiene que estar guiada por la austeridad, la transparencia y la eficacia y que debe afectar al funcionamiento del sector público".

En este sentido, Gallardón ha advertido de que "no se trata nunca de echar abajo el estado del bienestar, no se trata de recentralizar ni de modificar la Constitución", sino que de "garantizar los servicios públicos, dar cabida a esta reforma y que entren temas pendientes como una segunda descentralización o la revisión del régimen jurídico y financiero de las Comunidades y corporaciones locales" y hacerlo "desde el respeto a las competencias de los tres niveles administrativos".

Así, tras su experiencia de 16 años de gobierno, en la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid, Gallardón ha comentado que "he comprobado tres rasgos y han surgido tres preguntas".

En primer lugar, ha remarcado como el propio "sistema jurídico constitucional es proclive a la existencia de competencias compartidas o concurrentes" entre administraciones, para defender que "lo importante es que el reparto de atribuciones y responsabilidades entre los tres niveles sea racional y eficaz, que se gestione con eficiencia y austeridad en el gasto público".

Asimismo, "se establecieron técnicas de cooperación y participación en la toma de decisiones" y ha cuestionado si estas herramientas están "suficientemente desarrolladas porque son fundamentales para garantizar el funcionamiento de nuestro sistema y aquí tenemos un camino muy importante para desarrollarlo".

Sumar esfuerzos

En tercer lugar, ha observado que "el éxito o el fracaso de las grandes políticas públicas no depende necesariamente de la actuación de un único actor público", sino que "necesitamos sumar esfuerzos coordinados de los tres niveles territoriales".

Gallardón ha continuado al plantear si la distribución de responsabilidades entre administraciones es la adecuada ya que "a vces se establece una innecesaria duplicidad y un gasto excesivo a reconsiderar".

El alcalde ha reclamado que esta misma pregunta se aplique a aquellas competencias impropias que los ayuntamientos "no tenían que haber ejercido históricamente", para opinar que, en este terreno, "nos tenemos que enfrentar a un diálogo profundo y sincero", porque las administraciones no van a entrar "en una disputa por ejercer más poder político ni en una tensión competencial entre niveles.

"Al contrario, a muchas administraciones les aliviaría la situación si se dijese de forma clara a quién corresponde el ejercicio de las competencias" y la financiación "suficiente" para ejercerlas, ha apuntado, para exigir que se concrete "en la norma jurídica correspondiente qué entidad tiene que dar las competencias y la financiación".

Defensa de las diputaciones

En este mismo sentido, Alberto Ruiz Gallardón ha planteado una segunda pregunta y es la eficacia que tiene que "hasta dos y tres administraciones" presten determinados servicios públicos. Tras recordar una propuesta de Manuel Fraga, ha animado a evitar duplicidades realizando "un análisis técnico muy riguroso".

El alcalde popular ha observado que es "muy importante" en este debate "entender la diferenciación entre las grandes corporaciones locales que pueden abordar ciertas competencias y los ayuntamientos que carecen de las mismas" y, por este motivo, ha valorado que "la existencia de las diputaciones provinciales es absolutamente necesaria".

Por último, Gallardón ha instado a analizar "si los mecanismos de toma de decisiones son los más adecuados" y, como ejemplo, ha señalado que "no debería repetirse lo ocurrido con la Ley de la Dependencia", ya que "debajo de la misma se escondía un propósito electoralista del PSOE, porque hubo una muy deficiente participación de las Comunidades y entes locales en la toma de decisiones y ha ocasionado un severo problema de financiación".

A su juicio, "existe un amplio margen de mejora dentro de la distribución competencial y, en esta reforma pendiente, "tenemos que aprovechar el discurso de la austeridad para abordarla, porque no basta con reducir las partidas sino que hay que racionalizar", porque ahora "somos muchos los que hacemos las mismas cosas de forma concurrente y sería más eficaz y más barato si viésemos quién ejerce una competencia y cómo financiarla".

Ganar la batalla

Por su parte, el director del programa electoral del PP, Baudilio Tomé, ha subrayado que "no será posible ganar la batalla de los compromisos asumidos" en materia de empleo "sin unas administraciones realmente eficientes, austeras y que responsan a las necesidades de los ciudadanos, que sean sostenibles y estén libres del despilfarro y la mala gestión".

En este punto, ha indicado que en la reforma y mejora de las administraciones públicas se deberán seguir los principios de austeridad, transparencia y eficacia y, "aunque los tres son importantes", ha destacado la transparencia, porque "es esencial para, de verdad, poder hacer un buen gobierno, dar cuentas de manera permanente y hacer una política ejemplar".