No hace falta saber hablar para poder mantener una conversación muy adulta. Así lo ha demostrado Shanieke Pryor, un padre que ha compartido en su Facebook la charla que ha mantenido con su bebé.

Ambos están sentados en el sofá y parece que están viendo y comentando una serie. No se sabe si están viendo Juego de tronos o Peppa Pig, pero la conversación está de lo más interesante.

El bebé no para de argumentarle sus razonamientos, le mira de reojo, agita las manos, señala e incluso asiente.

Parece una charla de lo más distendida, pero es posible que el bebé no esté nada de acuerdo con su padre, porque en una ocasión le mira con cara de sorprendido.

Quizá el niño solo está imitando a su padre, pero lo cierto es que existe una relación entre lo que oyen los bebés y sus capacidades cognitivas.

Un estudio de la Universidad de York demostró que, cuanto más conversaciones adultas oyen, mayores son sus habilidades, tanto en el habla como en la compresión o el dibujo.