La maestra Sue East murió a los 58 años el pasado 19 de diciembre, tras una corta batalla contra el cáncer. Antes de que llegara su hora, la mujer quiso despedirse de sus alumnos con una emotiva carta en la que les informaba de que "iba a morir pronto" y les agradecía su "alegría y amistad". La reacción de los niños el día de su funeral sorprendió a todos los asistentes: cubrieron su ataúd de mensajes y dibujos.

En su carta, la maestra citó un pasaje de la novela El viaje de Dawn Treader, de C. S. Lewis (1952) con el que asemejaba la muerte con navegar en un bote pequeño y redondo en el horizonte, según cuenta Mirror. "Nunca olvidéis que hay polvo de hadas en cada momento, sin importar lo difícil que sea", escribió.

Casi 700 estudiantes, exalumnos, padres y madres y hasta miembros del personal del colegio se acercaron al funeral de Sue East para despedirse.

Los alumnos formaron parte de la ceremonia cantando, pero lo más sorprendente fue que cubrieron el ataúd de la maestra con dibujos de hadas, mariposas, arcoiris, corazones y, como hubiera querido East, de polvo de hadas. "Nos enseñó a creer en nosotros mismos, esparciendo polvo de hadas por todas partes", contó el portavoz del alumnado.

Por su parte, la profesora también había hablado de sus estudiantes en la carta: "Me encantó mi tiempo en St. Andrew's. Es una escuela impresionante y todos sois niños increíbles. Nunca pensé que pudiera encontrar tanta alegría en mi trabajo. Gracias a todos por compartir su alegría y amistad conmigo. Ahora será el momento oportuno de continuar con nuevas aventuras".