El bloguero británico Colin Furze construyó para el programa Top Gear una copia del coche de James Bond con varias de las funciones del original a partir de un antiguo BMW Z3.
Para lograr su objetivo, Furze contaba con un presupuesto máximo de 7.000 libras (8.000 euros) y, además, el tiempo corría en su contra, puesto que debía completar el proyecto en cinco semanas.
El coche del agente 007 comparte con el de Colin Furze un lanzallamas situado bajo el capó, un dispositivo que llena la cabina de humo y que se describió como "sistema de camuflaje interno", y un dispositivo que rocía aceite en las llantas traseras para facilitar la deriva en caso de persecuciones. Es en la parte trasera del vehículo donde se localizan la mayoría de los cambios. Ahí Furze colocó las armas airsoft que salen del parachoques trasero con solo presionar un interruptor.
El inventor, que acumula más de diez millones de suscriptores en YouTube, instaló también una rueda giratoria en la parte inferior del automóvil, que se podría utilizar para apuntar antes de disparar y para estacionar rápidamente de forma lateral.
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