El fin del mandato de Donald Trump avivó la información sobre las teorías conspiranoicas de QAnon, sobre todo por la presencia del llamado Q-Shaman, el hombre que asaltó el Capitolio vestido con pieles de búfalo. Pero ahora algunos seguidores han vuelto a ser tendencia por sus locas ideas sobre la entrevista que Oprah Winfrey le hizo al príncipe Harry y Meghan Markle.

Esta corriente sostiene que hay toda una red de pederastia y satanismo relacionada con nombres como Obama, Tom Hanks u Oprah y defienden las ideas del expresidente republicano. Sin embargo, ahora parecen haberse centrado en la comentada aparición de los duques de Sussex en la televisión de Estados Unidos.

La entrevista del pasado domingo ha llamado la atención por algunas de las declaraciones sobre la casa real británica, especialmente por parte de Meghan Markle, quien dijo que pensó en quitarse la vida y que algunos miembros de la familia de él cuestionaban el color que tendría el pequeño Archie.

Pero QAnon ha centrado su atención en la periodista y algunos sostienen que la figura de Oprah Winfrey estaba hecha con CGI (imagen generada por ordenador). El argumento principal que defienden es que tenía un dispositivo en su tobillo porque vieron bulto en una de sus botas, pero lo cierto que es un monitor que lleva porque está siendo investigada por tráfico.

Algunos incluso van más allá y dicen que no solo la entrevista fue por CGI y Oprah Winfrey no estaba allí, sino que la periodista ha sido "ejecutada". El analista político Arieh Kovler destacó que estas afirmaciones le parece bastante irresponsables sin tener ninguna prueba.

Esta no es la única teoría que ha sonado recientemente sobre el CGI en hechos importantes, pues a principios de 2021 también sonó la absurda idea de que el presidente Joe Biden era en realidad el fallecido John F. Kennedy con una máscara.