El pasado domingo, un usuario llamado Antonio compartió en un hilo de Twitter unas imágenes de un adorno gigante de Viladecans, en Barcelona. "He hackeado un muñeco navideño en mi ciudad y estoy haciendo cosillas con él", dijo junto al vídeo donde se le veía con un ordenador y lo que parecía ser el programa que utilizó para modificarlo.

Y es que este gran reno, que parecía tener sonido, ahora estaba cantando proclamas como "¡España libre! ¡España grande!" o "¡Viva España!". Sin embargo, tras todo el revuelo ocasionado -varios medios e informativos han tratado el tema de este adorno manipulado-, el tuitero se ha pronunciado para asegurar que él no fue el hacker.

"¿Me he montado una historia simulando que he sido yo para acabar el año con el mejor hilo del año? Sí. ¿Ha merecido por unas risas? También. El muñeco llevaba así desde el viernes, nadie había dicho nada y merecía viralizarlo", comentó en uno de sus mensajes.

De hecho, hay algunos datos que prueban su afirmación, pues aunque él lo compartió el domingo, hay varios usuarios que comentaron que llevaba así desde el viernes.

Otros más expertos en informática también señalaron que lo que se veía en la pantalla de su ordenador no servía para hackear el muñeco, por lo que esto confirmaría que se trataba de una broma.

Tal y como explicó él, cuando la gente pasaba por allí y lo veía con el ordenador, pensaban que el que estaba lanzando esos audios en el reno era él. Sin embargo, la mayoría coincidieron en que había una "niña de unos 10 años" recurrente en todos los momentos en los que se escuchaban estas proclamas. Al parecer, esta joven usaba un altavoz o un asistente de voz como Alexa, de Amazon, para esta travesura.

Su problema con el Ayuntamiento de Viladecans

Algunos tuiteros no se han tomado el hilo como una broma y criticaron esta manipulación del adorno puesto por el ayuntamiento. Pero parece que el propio consistorio también cayó en esta confusión y Antonio ha tenido que defenderse con todas sus pruebas para demostrar que él no es el culpable.

Parece que el tuitero está en conversaciones con el Ayuntamiento de Viladecans para que su hilo no le repercuta negativamente, ya que él solo se limitó a compartirlo.

Se desconoce cómo acabará esta historia, pero lo que está claro es que el reno está triunfando tanto que ya son muchos los que piden que se mantenga más allá de la Navidad.