Barrita, media, tostada... Hay muchas formas de llamarla según en la parte de España en la que nos encontremos; sin embargo, hay algo que tenemos todos en común: una tostada con un poco de aceite, tomate rallado y jamón, con un café con leche a media mañana o para desayunar, entra muy bien.
Aunque en pantumaca es un clásico, hay quien prefiere la opción dulce encima del pan recién salido de la tostadora, aquí interviene la mermelada de tomate. Este producto lo podemos hacer en casa, además es una buena opción cuando está empezando a madurar y no va a dar tiempo a consumirlo. ¿Te da pereza solo de pensar en ponerte hacer mermelada en casa? Eso es porque no has probado a hacer esta receta.
¿Qué se necesita para hacer una mermelada?
Tomate, azúcar y limón. No hace falta nada más, bueno, sí, ser estricto en las cantidades y el tiempo de preparación para que el resultado sea el deseado. También es importante cuidar la higiene del recipiente (frasco) donde vamos a guardar el producto para que quede bien sellado. De este modo, la mermelada durará más tiempo en buenas condiciones.
¿Cuál es la proporción de tomate y azúcar al hacer mermelada?
La cantidad apropiada de cada ingrediente dependerá de la cantidad de producto final deseado, pero para seis comensales, lo adecuado es 500 gramos de tomate y 250 gramos de azúcar.
- Lo primero que habrá que hacer es pelar y trocear los tomates. Aunque también se hace sin quitar la piel del tomate, ya que potencia el sabor. Lo que sí hay que quitar son las semillas.
- Se añaden los trozos de tomate, el zumo de un limón y el azúcar en un cazo y se deja reposar durante una hora para que se impregne todo.
- Cocemos la mezcla a fuego lento durante 45 minutos sin dejar de remover con una cuchara de madera.
- Antes de sacarlo del fuego, hay que tener en cuenta que al enfriar el producto aumenta en espesor, así que es mejor sacarlo antes.
- También hay quien le gusta pasarlo por la batidora para conseguir la textura deseada, pero eso es cuestión de gustos.
Propiedades del tomate
El tomate contiene hierro, licopeno y vitamina K, que ayuda a prevenir la calcificación de los vasos, mejorar la salud de los huesos y reforzar los sistemas de reparación de tejidos. Por eso es muy recomendable consumir tomate para un envejecimiento saludable en términos de articulaciones, salud cardiovascular y depuración del organismo.
Consumir frecuentemente tomate, ayuda con la presión arterial alta, el colesterol alto. Llevar una buena alimentación es una de las mejores formas de proteger nuestra salud. Para ello, la Fundación Española del Corazón consumir cinco piezas de fruta y verdura al día y que, dentro de estas, se consuman entre 3 y 7 miligramos de licopeno al día.
Esta es la forma de consumir licopeno de forma natural; sin embargo, también existen suplementos e incluso cremas cosméticas que lo incluyen, por las propiedades de cuidado de la piel que se le otorga. Es muy común encontrar sérums antioxidantes con este ingrediente, que el sector de la cosmética publicita como producto con poder antiedad e iluminador para suavizar arrugas y manchas.
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