Cómo freír pimientos verdes en sartén

No hay despensa bien pertrechada que no tenga pimientos. Junto a los ajos, cebollas y patatas forman el grupo de hortalizas básicas que siempre hay que tener. Los sofritos son la base de muchas recetas y todo sofrito gana con el pimiento.

Pimientos hay muchos, por color, forma y picante. Aunque de esto último sabe más en, por ejemplo, México que aquí. En España, no somos de mucho picante y con los pimientos quedan las excepciones de los de Padrón (que cada vez pican menos) y las piparras.   

Nos fijamos esta vez en los pimientos verdes. Dan sabor, color y tienen muchas propiedades. Son antioxidantes, antiinflamatorios y fuente de fibra. Entre sus beneficios: previenen la anemia, son buenos para el corazón, previenen los problemas visuales y ayudan a controlar el peso.

Los pimientos verdes son antioxidantes, antiinflamatorios y fuente de fibra

Pero vamos a la cocina. ¿Cómo se fríen los pimientos verdes en sartén? Básicamente, se trata de lavarlos, secarlos, abrirlos y limpiarlos de semillas ( o no), freírlos en una sartén, parte del tiempo con tapadera y al final añadir un poco de sal.

Hablamos, claro, de pimientos verdes de los que decimos italianos o Guernika.

¿Con semillas? ¿Con piel? 

Lo dicho, los lavamos, los secamos, les quitamos el tallo y les cortamos. Hay maneras: dejarlos en cuartos, partirlos por la mitad, hacer tiras... al gusto de cada uno. Luego les quitamos las tiras blancas que llevan en el interior. Les quitamos las semillas (hay quien las deja).

Calentamos aceite de oliva en una sartén. Cuando empiece a estar caliente ponemos los pimientos y los freímos a fuego medio-bajo para no quemarlos. Se trata de que se doren y queden tiernos. Parte del tiempo podemos tapar la sartén.

Si los queremos pelados, los tapamos para que al sudar sea más fácil quitarles la piel

Hay por cierto quien aprovecha para hacerlos con unos ajos golpeados pero sin pelar. Le dan un punto muy rico.

En cualquier caso, una vez que sacamos los pimientos: ¿con piel o sin ella? Si los queremos pelados, los sacamos y los tapamos para que al sudar sea más fácil quitarles la piel.

Aún calientes los sazonamos. Y ya están listos para comerlos solosCómo hacer pimientos asados en la freidora de aire., como guarnición o para animar cualquier bocadillo. 

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