Xavi Hernández, con problemas en el tendón de aquiles, y Sergio Ramos, que se ejercitó en solitario en el gimnasio, fueron las ausencias del primer entrenamiento de la selección española tras la presentación de la nueva camiseta, en el que participaron a menor ritmo los 'tocados' Gerard Piqué, David Silva y David Villa.

Xavi recibió tratamiento fisioterapéutico para solventar las molestias que arrastra del último partido de Liga, con el Barcelona frente al Málaga, y coincidió con el optimismo de los médicos, que aseguraron la presencia del centrocampista en el doble enfrentamiento contra Turquía.

"Estoy bien. Creo que llegaré a tiempo para jugar en el Santiago Bernabéu", aseguró Xavi en la zona mixta de la Ciudad del Fútbol.

Como es habitual en la primera sesión preparatoria de España, algunos futbolistas trataron específicamente su puesta a punto. Sergio Ramos, que acumula muchos minutos con el Real Madrid, trabajó con menor carga, en solitario, en el gimnasio.

Y los 'tocados' tuvieron un contacto menor con el terreno de juego. Durante quince minutos Piqué, aún afectado por la gripe, y en torno a veinticinco minutos Silva y Villa se entrenaron en el campo principal de la Ciudad del Fútbol.