Fernando Roig, presidente del Villarreal, mostró hoy su malestar con la estrella de su equipo, el argentino Juan Román Riquelme,

A Roig se le ha acabado la paciencia y mandó un mensaje a Riquelme: tiene que cumplir con las exigencias del club, porque sino "tendrá muchas dificultades con el presidente del Villarreal".

Riquelme, que en la jornada del miércoles no jugó ante el Racing de Santander por unas pequeñas molestias musculares, cuajó un mal partido en la goleada sufrida por el Villarreal el pasado domingo ante Osasuna (1-4).

"Riquelme es un jugador que tiene que cumplir lo que el club dice y nada más. Si no está dispuesto a hacerlo tendrá muchas dificultades con el presidente del Villarreal. Es un jugador más y tiene que cumplir con sus obligaciones, como el resto de jugadores. Si lo hace, no tendrá ningún problema y lo recibiremos con los brazos abiertos. Si no lo hace, veremos qué pasa", indicó.

Tras el partido ante el equipo navarro del pasado domingo, Roig bajó al vestuario para expresar su malestar por la imagen ofrecida por el equipo y la actitud de algunos jugadores en el transcurso del partido.

Respeto a los jugadores

"Creo que nosotros nos comportamos bien con todos los jugadores. Se les cuida, se les respeta, cobran y ellos solo tiene una obligación, cumplir", dijo Roig, tras la junta de accionistas que celebró hoy la entidad.

Roig, notablemente indignado, también recordó la reunión en el vestuario del domingo. "Voy a explicarlo muy fácil y muy sencillo. Cuando bajo a un vestuario sólo es para explicar la filosofía que yo tengo de este club. Lo dejo muy clarito, si hay alguien que se confunde es su problema", manifestó.

"Mi filosofía -continuó-, es clara: el que cobra del Villarreal debe estar muriendo por el Villarreal. Se puede decir en cualquier idioma o más alto, pero el resumen es que aquí se paga, se valora y se cuida a la gente, pero en el campo se debe dar el máximo".

Roig aseguró que no tiene problema alguno con ningún futbolista. "Puede ser que algún futbolista tenga problemas. El Villarreal abre los brazos a todos y no tiene problemas con nadie, pero, eso si, deben dar el máximo. El día de Osasuna no lo hicieron", dijo Roig, quien comentó que en Santander fue diferente, ya que "dimos la cara pero no pudo ser".