Sergio Ramos atendió a los medios de comunicación al término del partido entre el Real Madrid y Levante, quinto partido sin ganar, cuarto perdiendo, de los hombres de Lopetegui: "El Real Madrid no se lo puede permitir, sin puntuar de tres en tres. Es verdad que los de arriba no están lejos, pero debemos mejorar".

Precisamente sobre el técnico, el capitán se pronunció en la misma línea que Marcelo: todos están a muerte con Lopetegui.

"Los cambios de entrenador nunca son buenos. Es un poco ventajista hablar ahora que las cosas van mal. Yo, como capitán, lo que te puedo decir es que Julen tiene todo el apoyo del vestuario", dijo Ramos. "Julen es una persona muy motivadora. Transmite, convence...ante todo hay que creer. Cuando vives un momento así te vas jodido, no sólo el entrenador, todos. Todos debemos hacer algo para cambiar esta dinámica", añadió.

En cuanto a la visita de Florentino al vestuario al terminar el partido, no quiso el capitán blanco revelar nada: "Sería muy descarado contarte lo que hablamos en el vestuario con el presidente, él y yo hablamos mucho. La decisión de echar o no al entrenador no depende de los jugadores". En ese sentido, reafirmó su apoyo al técnico y reiteró que la decisión no le corresponde a él: "A mí se me piden opinión, la daré, pero no creo que una decisión como esta no depende de un jugador".

"Hay que hacer autocrítica y rendir al mejor nivel. La suerte hay que tenerla a tu favor también. Hemos tenido errores individuales que han acabado el gol, pero no hay que señalar a nadie, todos somos culpables", comentó Ramos.

Sobre las críticas, el defensa destacó el efecto de estas en el ánimo del equipo: "Los que más nombre o experiencia tenemos, tenemos la espalda muy ancha porque las críticas recaen sobre nosotros. Agradezco a los críticos sus comentarios, me motivan mucho".