Tras la derrota por 0-1 del Madrid en el Bernabéu ante el Mallorca, el entrenador del Real Madrid, Bernd Schuster, saludó al del Mallorca, Gregorio Manzano, pero de otra forma muy especial y, al parecer, poco cortés. Le comentó algo al oído nada elegante recriminándole sus declaraciones previas.

Aunque en principio Manzano no quiso desvelar qué le dijo, sí apuntó en una entrevista en la Cadena Ser que "le han sobrado las palabras que me dijo después de saludarme". Antes, se habían hecho las fotos de rigor y saludos sin problemas. Pero la cosa acabó en discusión.

Ambos habían mantenido en los días previos al partido un enfrentamiento dialéctico que había iniciado Manzano. El entrenador mallorquinista insinuó que el árbitro iba a favorecer al Real Madrid, aunque luego rectificó. Schuster le respondió con su habitual ironía, aunque de forma dura.

En la rueda de prensa posterior al partido de vuelta de Copa, Schuster no quiso apenas mencionar al árbitro. "Me gustó. Ha hecho lo que tenía que hacer", señaló. Al ser preguntado sobre su conversación, Schuster indicó que le dijo "cara a cara lo que tenía que decirle" y se negó a dar detalles frente a los informadores.

Schuster, que compareció en rueda de prensa después de Manzano, no quiso comentar que le parecía la frase de éste en la que dijo que "alguien que sabe inglés no siempre es un buen profesor de inglés". "No me parece nada, si quiere hablamos del partido", respondió.

Manzano, también irónico

Ante los periodistas de la rueda de prensa, Manzano no quiso comentar la conversación que mantuvo con Schuster tras el partido. "Permítanme que es una conversación privada y no la voy a comentar. Se queda en el campo. Nos dimos la mano antes y después. No tengo ningún problema con él. No sé si el lo tiene conmigo", comentó Manzano.

Pero sí aprovechó el entrenador del Mallorca para darle un "recado" al del Madrid: "A Schuster le han sobrado las palabras que me dijo dijo después de saludarme, y yo le daría un consejo: un poco de humildad a veces viene bien"."No todos tenemos en la vida las oportunidades para poder desarrollar el fútbol jugando a gran nivel, como Bernardo hacía y por eso lo admiraba. Yo mientras, me preparaba para entrenar.