Si había alguna duda que el pívot Dwight Howard es el jugador más dominante de la liga quedó despejada después que aportó un doble-doble de 21 puntos y 23 rebotes para liderar a los Magic de Orlando a la victoria por 92-80 ante los Lakers de Los Ángeles.

Howard dominó de principio a fin a todos los hombres altos que le pusieron los Lakers para marcarlo, empezando por el pívot Andrew Bynum y acabando con el reserva Troy Murphy, nadie pudo frenarlo y al concluir la primera parte ya tenía 10 puntos y 15 rebotes para darle a su equipo la ventaja parcial de 48-31. Como sucedió la noche anterior ante los Heat de Miami, los Lakers carecieron de ideas y de poder físico en la primera parte, donde sólo el escolta Kobe Bryant anotó 15 puntos, y ahí se les acabaron las posibilidades de aspirar al triunfo porque en la segunda, cuando intentaron reaccionar, los Magic, con Howard de líder, no se lo permitieron.

Howard, que ha pedido el traspaso antes de que concluya la presente temporada y tiene a los Lakers como su principal objetivo, les mostró al equipo angelino cual es el camino a seguir para que vuelvan a ser un equipo campeón. La comparación de Howard con los dos hombres altos estelares de los Lakers, Bynum y el ala-pívot español Pau Gasol, fue sólo inferior en dos puntos, y superior en un rebote.

El pívot estrella de los Magic consiguió su quinto partido de la temporada con un doble-doble de 20 puntos y 20 rebotes para convertirse en el primer jugador desde Kareem Abdul Jabbar, en la temporada de 1975-76, que ha logrado esa marca en los 15 primeros encuentros de liga. Abdul-Jabbar logró siete partidos en los 15 primeros partidos cuando jugaba con los Lakers.

Howard también se convirtió en el primer jugador de la NBA que ha conseguido al menos 21 puntos y 23 rebotes en dos partidos consecutivos desde que lo logró el pívot Kevin Willis, de los Hawks de Atlanta, en noviembre de 1991.

Un triple sobre la bocina de Kevin Love justo cuando el partido parecía destinado a resolverse en la prórroga dio una increíble victoria a los Minnesota Timberwolves frente a Los Ángeles Clippers (98-101), en un duelo que vio una actuación de menos a más del español Ricky Rubio.

Love registró 17 puntos y 14 rebotes mientras que Rubio redimió su mala actuación con unos inmensos últimos minutos para acabar con nueve rebotes, seis rebotes y seis asistencias, una estadística que no refleja la masiva incidencia que ejerció en el resurgir de su equipo.

El acierto encestador del alero Rudy Gay y del pívot español Marc Gasol permitió una vez más a los Grizzlies de Memphis dominar con su juego ofensivo y vencer por 98-81 a los Pistons de Detroit en su visita al Palace de Auburn Hills. Gay anotó 24 puntos para liderar al ataque por alto de los Grizzlies que tuvieron a cinco jugadores con dobles dígitos, un 57 por ciento de acierto en los tiros de campo y el 56 (5-9) de triples.

Mientras que Gasol volvió a realizar una buena labor individual y de equipo al aportar 17 puntos para conseguir la segunda mejor anotación de los Grizzlies, que ganaron el quinto partido consecutivo. Gasol jugó 37 minutos en los que anotó 6 de 11 tiros de campo y 5-6 desde la línea de personal, capturó seis rebotes -todos fueron defensivos-, repartió tres asistencias y puso un tapón.

El ala-pívot LaMarcus Aldridge anotó 33 puntos -su mejor marca de la temporada- para liderar a los Trail Blazers de Portland, que se impusieron por 94-84 a los Raptors de Toronto, en su visita al Air Canada Centre. Calderón jugó 36 minutos en los que aportó siete puntos después de anotar 2 de 8 tiros de campo, incluido el único triple que hizo, y estuvo perfecto 2 de 2 desde la línea de personal, recuperó tres balones y capturó dos rebotes.