Rafael Nadal, que superó la segunda ronda del Masters Series de Madrid tras batir al letón Ernests Gulbis (7-5, 3-6 y 6-3), se mostró feliz por el arranque, alabó el apoyo del público madrileño y rechazó sentir una presión especial porque pase lo que pase será "un año fantástico".

"Creo que este año he pasado ya toda la presión que tenía que pasar. Pase lo que pase será un año fantástico. Tengo menos presión que nunca. Menos de lo habitual. Pase lo que pase todo estará bien", reconoció Nadal, que retoma la competición en Madrid tres semanas después de su participación en la eliminatoria de semifinales de la Copa Davis contra Estados Unidos.

"Las tres semanas de descanso las necesitaba. Estar en casa con los amigos, con la familia. La verdad es que las necesitaba y lo he agradecido", dijo Nadal, que en segunda ronda se enfrentará al francés Richard Gasquet, al que ha batido en las cinco ocasiones que se han enfrentado.

"Con Gasquet tengo un buen récord pero es complicado siempre. Espero poder jugar a mi mejor nivel y ganar", destacó el número uno del mundo, que subrayó y agradeció el apoyo incondicional del público de Madrid.

"El público siempre es fantástico en Madrid. Especialmente en este torneo se vuelca con los españoles y conmigo especialmente. Tengo que darles las gracias, no sólo por hoy sino siempre que he venido", dijo Nadal, que fue atendido en un tramo del partido por el fisioterapeuta.

"He notado un poco de pinchazo en el glúteo derecho y me ha ayudado el fisioterapeuta. Pero parece que no ha ido a más. Estoy bien", explicó Rafael Nadal, que resaltó las dificultades que encontró en el choque contra el letón, con el que necesitó agotar los tres parciales.

"La altura en pista cubierta se nota menos. Esto es un factor a tener en cuenta. Pero en cualquier sitio Gulbis es dificilísimo. Especialmente en primera ronda, cuando todavía no tienes tomado el ritmo a la competición", concluyó el tenista español.