El tenista español y número cinco del mundo, Rafa Nadal, comentó tras conquistar su primer torneo ATP del año este domingo en Sao Paulo, en la final del Abierto de Brasil frente al argentino David Nalbandian (6-2, 6-3), que espera que este triunfo "vuelva a ser el principio de algo bueno", tal y como sucedió en 2005.

"En 2005 empezaron a sucederme grandes cosas después de vencer aquí. Espero que esta vez vuelva a ser el comienzo de algo bueno", declaró feliz al público presente en la pista central de las instalaciones brasileñas. Y es que han sido nueve meses los que han tenido que pasar para que el tenista mallorquín vuelva a probar el sabor del triunfo tras su lesión, y la final perdida hace unos días en Viña del Mar.

"Cuando la rodilla me duele no me puedo mover a gusto. Si no me puedo mover adecuadamente, no puedo golpear la bola bien. Cuando mi rodilla vaya mejorando mi tenis también lo hará, mi cabeza también y todo irá a mejor. Hoy ha sido el día que mejor me encontré en la pista", añadió.

Echando una mirada al pasado, al 2005, los buenos recuerdos abundan para Nadal. En Brasil comenzó a vencer en un año que acabaría adjudicándose once torneos —el año que más ha conseguido—, incluyendo su primer Roland Garros. Es por ello que el de Manacor reserva un lugar especial para Brasil.  "Brasil siempre estará en mi corazón", añadió Nadal en su discurso de bicampeón.

Así, se espera que Nadal vuelva a probar suerte en el Abierto de Acapulco, en México, a finales de este mes. Otro torneo que se disputa en tierra batida, y en el que también estuvo en 2005, victoria incluida. Continua así una ruta de preparación que le llevará a defender su título en Francia, en Roland Garros.