Un gol en el último minuto desbordó la alegría en la plantilla del Alcoyano, que consiguió igualar a dos al Barcelona en el Camp Nou. Una alegría que sólo consigue aumentar la moral del equipo alicantino, que se despide de la Copa del Rey tras el 0-3 conseguido en la ida por el club azulgrana.

Goles del suplente

Santiago Ezquerro, un habitual en el banquillo, aprovechó la oportunidad que le dio el técnico azulgrana Frank Rijkaard y endosó dos goles en los diez primeros minutos de juego. El primero después de un rechace que aprovechó el riojano; y el segundo gracias a una gran asistencia de Bojan.

Con el marcador a su favor y con la clasificación más que encarrilada, el Alcoyano tampoco inquietaba la portería del debutante Oier Olazábal. El joven portero, sin las estrellas (Messi, Henry, Ronaldinho,Eto’o e Iniesta) en el campo, fue el centro de atención junto a Edmilson, recuperado, y Bojan, de nuevo estelar.

A falta de veinte minutos para el final, cuando el Alcoyano parecía cansado de correr detrás del balón sin obtener oportunidades claras, llegó la esperanza para los alicantinos. Perona no perdonó desde el punto de penalti, un tanto que reanimó a los suyos.

El Barcelona tuvo que despertar y buscar el tercero, pero lo que llegó fue el segundo para el Alcoyano.