El ex futbolista argentino Diego Armando Maradona, de 46 años, ha salido ya de la clínica psiquiátrica Avril (Buenos Aires), en la que estaba ingresado, desde el pasado 21 de abril.

Recibió el alta en la noche del domingo y ahora "deberá hacer un tratamiento ambulatorio", como indicó su médico personal, Alfredo Cahe.

Maradona trata de superar ahora sus problemas con el exceso de alcohol tras haber pasado, según su doctor, el síndrome de abstinencia.

En principio, se pensaba en trasladarle a Suiza, pero ya hace una semana que se decidió que estuviera en Argentina, para tener más cerca a sus familiares y amigos.

No se han cumplido los plazos previstos

Cahe añadió que Maradona se ha comprometido a acudir tres veces por semana a la clínica Avril.

El médico había calculado el pasado jueves que Maradona permanecería ingresado en el sanatorio "al menos diez días", pero desde que sufrió la primera crisis (28 de marzo) ninguno de los plazos previstos para sus tratamientos se han cumplido.

Antes estuvo ingresado en un hospital

La salud de Maradona volvió a resentirse el pasado mes de marzo y necesitó ser ingresado en un hospital de la capital argentina (De los Arcos) porque sufría una hepatitis tóxica aguda ocasionada por el consumo de alcohol.

Su médico personal siempre ha negado una recaída en la cocaína, pero el desmedido consumo de bebidas alcohólicas ha llevado a Maradona a tener problemas psicológicos.

Fue la recomendación del hospital, dar también apoyo psicológico a Maradona. "Se cree un Dios", afirmaba el doctor que le atendió en esta primera clínica. Maradona salió y ya pensaba que estaba recuperado, comentó que quería ir a ver el clásico de la liga argentina. Pero no fue así.

Alfredo Cahe, médico personal y amigo desde hace muchos años, le convenció para que ingresara en esta clínica psiquiátrica. Accedió por propia voluntad pero, como en otras ocasiones, depende de Maradona su total recuperación. Y que crea en ella.

Cahe creyó cuando salió del hospital que Maradona hacía mal y eso puso furioso al ex jugador, que en un programa de televisión afirmó que había despedido al médico, lo cual finalmente no se concretó.

Cahe ya comentó hace una semana que Maradona "estuvo muy grave".En Argentina la expectación alrededor de Maradona no ha cambiado, incluso los rumores pusieron en alerta al país durante una noche. Para muchos argentinos, este futbolista legendario es una persona muy amada.

"La cura total de su problema hepático llevará un tiempo", aseguró la semana pasada Cahe, quien ya advirtió que Maradona tenía una "personalidad adictiva".

Sus hijas Dalma y Giannina ponderaron la semana pasada, en un programa de televisión, la actitud de Maradona de reconocer su necesidad de ingresar en una clínica psiquiátrica.  "Papá esta bien y quiere recuperarse. El sabe muy bien cómo está y qué necesita", aseguraron.