Con la clasificación para los octavos de final de la Copa del Rey en el bolsillo, el Real Irún disfrutó ayer de la noche madrileña.
A pesar de perder en el Santiago Bernabéu por 4-3, el 3-2 logrado en la ida sirvió para eliminar al Real Madrid frente a este 2ª B que ayer celebró por todo lo alto el pase. Después del partido, todos sus miembros se fueron a cenar a un conocido restaurante madrileño, donde se escucharon cánticos y se vieron servilletas al aire.
Desbordantes de alegría, los de Irún hablaban ya de su próximo rival, y por pedir, quieren al Barcelona.
Luego la fiesta continuó por la capital de España. Hoy, entrenamiento a las 12 (una hora más tarde de lo previsto) en Valdebebas.
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