El entrenador del Barcelona, Pep Guardiola, es posiblemente uno de los entrenadores, que dirige a un conjunto puntero en Europa, que menos cobra, después de filtrarse a la prensa las condiciones contractuales por las accedió a comandar el banquillo blaugrana por las próximas dos campañas.

Según publica el diario Sport, el ex capitán blaugrana percibe de salario base un millón de euros y, el resto de su salario, iría en consonancia a los objetivos que consiguiera el equipo a los largo de estas dos campañas, remunerándoselo en forma de incentivos.

De esta manera, se confirma que el propio Guardiola confía en su estilo de juego, ese que le hizo perder en Numancia y por el que ha recibido muchas críticas al ser muy similar al de Frank Rijkaard, y ha ligado a él su propio sueldo. De momento, ha conseguido el primero de sus objetivos, el pase a la Liga de Campeones. Ahora habrá que esperar hasta dónde llegar el nuevo proyecto de Laporta.