Gerard Piqué fue uno de los protagonistas de la celebración del 30º aniversario de la Fundación Aura, una entidad sin ánimo de lucro que trabaja para ayudar a mejorar la calidad de vida de personas con discapacidad intelectual.

El defensa del FC Barcelona fue el encargado de clausurar el evento y no pudo contener las lágrimas, pues se emocionó durante su discurso.

Sus palabras también conmovieron a los más de 800 asistentes a la gala, que incluyó la entrega de los premios “Empresas con Aura” que reconocen a las entidades que han contribuido a la reinserción laboral y social de personas con discapacidad intelectual.

Piqué subrayó en su intervención que "estas personas son un ejemplo de superación y esfuerzo, valores que deben ser reconocidos por la sociedad". El defensa se emocionó por primera vez al referirse a los "trabajadores incansables" que trabajan con Aura y confesó que "mi primer objetivo en la vida era hacer que mis padres se sintieran orgullosos".

El azulgrana volvió a emocionarse unos instantes después, cuando aseguró que "vosotros con vuestro trabajo y esfuerzo hacéis que vuestros padres se sientan orgullosos".