Sigue la violencia en el fútbol base español.

Esta vez, en un campo de Preferente. Ocurrió tras decretar el árbitro el final del partido entre el Rotlet Molinar y el Son Verí, con 3-0 para los primeros.

Sin embargo, el camino a los vestuarios no fue todo lo tranquilo que se presupone. Aunque hay dos versiones de lo ocurrido, la realidad es que uno de los futbolistas, en este caso Diego Romero, acabó sin un trozo de nariz y con dos puntos de sutura.

Según informa El Mundo, el zaguero Diego Romero denuncia que el delantero local Iván Bonnín Bote le agredió: "De camino a vestuarios discutíamos sobre el partido, todo en el plano verbal". Fue entonces cuando, sin venir a cuento, Bote le habría dado un mordisco que acabó llevándole al hospital, donde le intervinieron.

También lo hace un compañero de Romero en las redes sociales.

Sin embargo, el presunto autor del mordisco da otra versión y señala que, camino de las duchas, admite que se burló de Romero y éste se habría lanzado a por él, dándole un cabezazo con tan mala suerte que su nariz impactó con la dentadura del zaguero.

El incidente pasó desapercibido para el árbitro, que no dejó constancia alguna en el acta del partido.