El primer preparador físico europeo que trabajó en la NBA, el italiano Francesco Cuzzolin ha reconocido que la participación de equipos de baloncesto europeos en la competición estadounidense "es un sueño que puede ser real, aunque para empezar a planteárselo tendrían que poner 60 millones de euros sobre la mesa".

Desde su punto de vista, está "más cercana" una Conferencia Europea de baloncesto, aunque vea capacitados a varios clubes para poder dar este salto "aunque tan solo en uno o dos casos por país y en aquellos donde el baloncesto está más arraigado".

Cuzzolin, que ha participado en el curso Nuevas tendencias en el entrenamiento deportivo, organizado en el Centro Especializado de Alto Rendimiento (CEARD) de León por el Consejo Superior de Deportes y la Universidad de León, ha expuesto su experiencia en el conjunto canadiense Toronto Raptors, después de haber trabajado en varios países como Italia, Turquía o Rusia, con clubes y federaciones.

El preparador físico italiano ha considerado que las diferencias entre el baloncesto estadounidense y el europeo "cada vez son menores, porque allí se necesita el conocimiento que existe en Europa para la preparación de jugadores, aunque allí tengan mucho más claro la explotación del negocio".

Franceso Cuzzolin ha destacado de la Liga NBA, fundamentalmente, "su enorme organización en todos los sentidos", aunque ha considerado que "el ritmo de partidos es imposible de aguantar y por eso la preparación física solo está encaminada a sobrevivir, a resistir a jugar y seguir jugando".

Con respecto al baloncesto europeo, ve a España como "un ejemplo a imitar, lo que le ha permitido dominar en el continente los últimos cinco años, aunque la incógnita surge después de que esta generación, que se está haciendo mayor, dé paso a la siguiente".

Por eso, ha confiado en que Italia, que en los últimos años parecía haber bajado un peldaño en cuanto a los resultados de las selecciones, pueda aprovechar las nuevas generaciones que le han vuelto a colocar entre los candidatos, "aunque el problema es la falta de número de jugadores suficientes para que la liga sea competitiva".