La era Pepu Hernández camino del Mundial de Japón se estrenó con una apabullante paliza ante una China muy debilitada sin Yao Ming, al que sin duda sus compatriotas echaron de menos en un partido que resultó un paseo para España que hizo lo que quiso con los orientales (96-49).

Las diferencias empezaron a marcarse en los primeros compases del partido, con dos triples prácticamente consecutivos de Garbajosa, al que secundaban Navarro y Calderón, lo que provocó que a los cinco minutos de juego el electrónico reflejaba un escandaloso 20-2.

El panorama cambió poco en el segundo parcial, y es que pese a que los orientales mejoraron algo desde el tiro de personal, en general su selección de tiro era muy mala, lo que aprovechó el seleccionador español para repartir minutos de juego.

Ocasión para hacer rotaciones

El quinteto rotaba continuamente lo cual no menguaba el nivel de concentración y sobre todo el acierto desde la línea de 6,25, lo que unido a los puntos del cordobés Felipe Reyes llevaron a que España llegara al descanso doblando a una decepcionante China (50-23).

Con la reanudación, Kazlauskas pareció espabilar a los suyos, que con una mejor selección de tiro recortaron ligeramente diferencias, hasta que apareció Pau Gasol y un parcial de 10-0, que llevó de nuevo a casi doblar a China al final del tercer cuarto (73-38).

Así se encaró el último cuarto, con todo decidido y la fiesta en la grada, que en todo momento llevó en volandas a un equipo que aplastó literalmente a una China que nunca pudo con la defensa española y bajos su aro hizo aguas tanto debajo de tableros como desde fuera.

Datos del encuentro

96 - España (25+25+23+23): Navarro (13), Jiménez (4), Garbajosa (18), Calderón (8) y Gasol (10) - cinco inicial - Reyes (16), Cabezas (4), Rudy Fernández (9), Berni Rodríguez (4), Alex Mumbru (10), Sergio Rodríguez y Marc Gasol.

49 - China (11+12+14+12): Zhu (4), Wei Liu (6), Wang (13), Yi (13), Ke Mo - cinco inicial - Yue Sun (2), Qingpeng Zhang, Gong (5), Songtao Zhang (3), Ke Chen y Feng Du (3).