El Chelsea, con nueve hombres sobre el césped por las expulsiones de Bosingwa y Drogba en la primera parte, no fue capaz de superar hoy a domicilio al Queens Park Rangers, que se impuso por 1-0.

Un gol de penalti en el minuto 10 otorgó la victoria a los locales en un partido marcado por la inferioridad numérica del equipo del técnico André Villas-Boas durante la mayor parte del encuentro.

El Chelsea continúa en el tercer puesto de la clasificación, con 19 puntos, tras perder la oportunidad de adelantar en la tabla al Manchester United, que cayó en su campo ante un Manchester City que le infligió una de las goleadas más abultadas de su historia (1-6).

El técnico André Villas-Boas no pudo contar por tercer encuentro liguero consecutivo con el español Fernando Torres, después de que el delantero, que ha recuperado su olfato goleador en las últimas semanas, viera una tarjeta roja en el choque contra el Swansea.

Ante la ausencia del 'Niño', el portugués optó por un ataque formado por el joven inglés Daniel Sturridge y el marfileño Didier Drogba, apoyados por el español Juan Mata.

A los diez minutos del encuentro, tras un arranque dubitativo por parte de ambos conjuntos, los locales se adelantaron por medio de un penalti que convirtió el islandés Heidar Helguson.

El guardameta de los 'blues', el checo Petr Cech, alcanzó a desviar con una mano el disparo a media altura del delantero de QPR, pero no logró evitar que el balón se introdujera en su meta.

El Chelsea controlaba aparentemente el juego, pero chocaba una y otra vez contra la defensa del Queens Park y perdía balones en la zona de tres cuartos.

Los problemas para Villas-Boas se hicieron más profundos cuando, en el minuto 33, el centrocampista portugués Jose Bosingwa vio la tarjeta roja y, apenas diez minutos después, en el 41, lo hizo el francés Didier Drogba.

El portugués trató de cambiar la dinámica del encuentro dando entrada en la segunda parte al francés Nicolás Anelka, en sustitución de Mata, pero el Chelsea no encontró la forma de superar al guardameta Patrick Kenny.

El Arsenal del técnico Arsene Wenger se impuso al Stoke City (3-1) en el Emirates Stadium en la novena jornada de liga inglesa y se sitúa en el puesto número siete de la clasificación, tras haber firmado uno de los peores inicios de temporada en la historia del club.

Dos goles del holandés Robin Van Persie en la segunda parte desencallaron un partido que el Stoke había logrado empatar por medio de Crouch en la primera.

El técnico Arsene Wenger dio descanso de inicio al delantero holandés, que ha marcado nueve goles esta temporada con los 'gunners', y su lugar en el ataque lo ocupó el francés Marouane Chamakh, junto al marfileño Gervinho. Sin embargo, finalmente fue Van Persie el que resolvió el partido con dos goles.