La mano de Iker Casillas está siendo la protagonista estos últimos días en la ciudad deportiva de Valdebebas.

Según informa Marca, el portero del equipo blanco lleva tres días sin poder 'hacer portería' por culpa de unas molestias en el dedo anular y en el meñique de la mano izquierda. Una lesión que requiere de un tiempo mínimo de reposo.

Iker recayó de su lesión en el partido de la selección ante Francia de la Rosaleda. Y ante el Valladolid en el Bernabéu, el portero se resintió de su dedo.

Los médicos del Madrid le han revisado la mano y se le diagnosticó una fuerte contusión, pero sin llegar a luxación.

El lunes se le puso un tratamiento que consiste en tomar antiinflamatorios, ponerse hielo en la zona dañada y hacer fisioterapia.

En el club nadie se ha planteado todavía si debe parar y no jugar el sábado contra el Betis. Se va a esperar al día de hoy para comprobar cómo está evolucionando esa mano, si le duele y si puede hacer ya trabajo de portería.