Pocos, pero valientes

Con Rienda como gran baza de medalla, 16 deportistas españoles toman parte en los Juegos Olímpicos de Turín.
Pese al gran número de practicantes de deportes de invierno, España sigue a años luz de las potencias mundiales. ¿Falta tradición?, ¿cuestión de medios? En cuanto a resultados, todavía se vive del pasado con los éxitos ya lejanos de los hermanos Fernández Ochoa, Blanca (Albertville 92) y Paco (Sapporo 72).

Ahora, por palmarés, María José Rienda llega a Turín como la líder de los 16 expedicionarios del equipo olímpico, la representación más numerosa. La granadina, que además será la abanderada de los españoles, luchará a partir del viernes, sobre todo, en el gigante de esquí.

Solos ante el peligro

Aunque pocas, España alberga bazas en algunas pruebas. El fondista J. J. Gutiérrez, que en Turín afronta sus quintos Juegos, va a por todas, al igual que Iker Fernández, en snowboard. Carolina Ruiz, con experiencia internacional, luchará en todas las pruebas del esquí.

Leyre Morlans y Andreas Casanovas (esquí); Diego Ruiz, Vincenc Vilarrubla, Laia Aubert y Laura Orgué (fondo); Nuria Montané (esquí artístico); Jordi Font, Ibon Idígoras, Clara Villoslada y Queralt Castellet (snowboard) y Luis Alberto Hernando (biatlón), completan la expedición española.Poca representación, deportes desconocidos... o casi. El bobsleigh, por ejemplo, es olímpico desde sus inicios. Como inmortalizó la Disney en Cool runnings, trineos aerodinámicos surcan a toda velocidad un circuito prefijado.

El skeleton es una variedad del bobsleigh, aunque se disputa de forma individual. En el curling, deporte de equipo de origen escocés, dos escobas que pulen el hielo para facilitar el deslizamiento de una piedra de granito que hay que acercar al centro de un círculo de 3,66  metros de diámetro. ¿Algún día ganaremos?.

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