La fiesta para homenajear al héroe local comenzó con un gran almuerzo en el que, por supuesto, el campeón catalán también participó. Más tarde fue el propio Coma quien se subió al balcón del ayuntamiento de Avià para, desde allí, pronunciar unas palabras de elogio a sus paisanos. El piloto catalán, que se inició en las motos con solamente ocho años (su tío le regaló una Montesa Cota que le sirvió para recorrer el terreno montañoso cercano a su casa), quiso agradecer a sus conciudadanos el apoyo y la confianza que siempre han tenido en él. Además, lo hizo brindándoles una victoria que se espera no sea la última.

Y es que Marc Coma al final ha ganado el raid africano después de cinco participaciones, consiguiendo la victoria en la última edición y el segundo puesto en la anterior. Por esa regularidad y por la experiencia que el piloto de 29 años va acumulando en cada carrera, no es nada descabellado que Coma vuelva a brindar alegrías muy pronto sus vecinos.

Una vez concluido el acto en su pueblo de Berguedà, el deportista catalán puso rumbo a la capital catalana, donde había sido invitado por el Fútbol Club Barcelona para presenciar, en el Camp Nou, el partido de fútbol que ayer enfrentó al Barcelona y al Alavés en Liga. Coma, además de disfrutar del encuentro en el palco, protagonizó el saque de honor.

«Ha sido algo impresionante»

El propio Marc Coma no podía articular apenas palabra tras el homenaje recibido ayer. «Ver a tanta gente conocida coreando mi nombre me ha producido una gran alegría». Respecto a sus retos futuros, Coma tiene dos: «En primer lugar quiero descansar un poco y pasar más tiempo con mi familia, pero ya tengo en mente el inicio de la competición, que será muy duro». Lo que el piloto catalán sí tiene bien claro es su regreso a la arena senegalesa: «El año que viene volveré al Dakar y ojalá que pueda ganarlo».