La historia de saltador de altura ruso Ivan Ukhov no tiene desperdicio alguno.

El pasado miércoles, Ukhov entraba en los registros de la historia del atletismo al conseguir saltar el listón situado a 2,40, metros en pista cubierta en la reunión de Atenas, una marca que sólo han superado un total de seis atletas y que se encuentra a 3 centímetros de la plusmarca mundial de Javier Sotomayor (2,43 metros).

Lo curioso del tema es que este saltador de 22 años y 1,92 metros de altura abochornó a medio mundo hace cinco meses, cuando intentó realizar un salto en Lausanne bajo los efectos del alcohol. El atleta, avergonzado, argumentó que el motivo de su estado ebrio se debía al abandono de su novia, buscando la compasión de la IAAF (Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo) para evitar una ejemplar sanción, algo que consiguió.

Ahora, más centrado en la competición según parece, se ha convertido en la referencia de salto de altura del mundo. En dos meses ha conseguido mejorar su marca en seis centímetros (de 2,34 metros a 2,40 metros) e incluso ha intentado pulverizar la marca del cubano Javier Sotomayor, un récord inamovible hasta la fecha y que cumplirá 20 años el 4 de marzo (lo logró en Budapest).