El Atlético de Madrid pasó en diez horas de la ilusión, con 21.000 aficionados aclamándoles en el estadio Vicente Calderón, a la enésima decepción en un derbi contra el Real Madrid, que le derrotó una vez más en el choque de la capital de España y agrandó hasta 24 partidos la racha sin victoria rojiblanca.

No encuentra la fórmula el equipo de la ribera del Manzanares para doblegar a su 'eterno' rival en los últimos trece años y un mes, desde aquel 30 de octubre de 1999 que venció por 3-1 en el Santiago Bernabéu, desde un triunfo que protagoniza cada previa de un derbi en los últimos tiempos, desde la última vez que sometió al Madrid.

No cambió la historia el 1 de diciembre de 2012. El Atlético llegaba como nunca. Lanzado con su mejor inicio de Liga de la historia, con solo cinco puntos perdidos en trece jornadas, en las que lucían sus once triunfos; en el segundo puesto, ocho puntos por encima del Real Madrid, por delante de su rival por primera vez antes de un derbi desde el curso 1998-99...

Las expectativas eran altas en el conjunto rojiblanco. También entre la afición, sin festejar una victoria en un derbi contra su vecino de la capital de España en los últimos 23 duelos disputados entre ambos equipos, siempre con un desenlace amargo, la derrota, diecisiete veces, o el empate, en seis ocasiones.

La ilusión se desbordó por la mañana en el estadio Vicente Calderón, donde se reunieron más de 21.000 seguidores para alentar a su equipo, diez horas antes del choque en el Santiago Bernabéu, en el último entrenamiento previo del equipo antes de un partido señalado en rojo por todos los hinchas del conjunto rojiblanco.

El Atlético sintió la energía de su gente, se plantó en el derbi motivado, consciente de la dificultad de cualquier enfrentamiento ante el Real Madrid, y más en su estadio, pero convencido de que tenía opciones, de que podía alterar una racha infame, la peor de su historia en los choques ante su 'eterno' rival.

Sin el brasileño Filipe Luis, fuera de combate por una sobrecarga muscular, y con el argentino Daniel 'Cata' Díaz como única novedad de la alineación, el argentino Diego Simeone diseñó un choque serio, frenó las rápidas transiciones de contragolpe del Real Madrid, pero apenas apareció por la portería de Iker Casillas.

No fue suficiente para cambiar la historia de un derbi repetitivo, que comenzó con ilusión y que terminó en derrota, en otra decepción del Atlético contra el Real Madrid. Ni en un momento tan dulce del equipo rojiblanco, con el consuelo de que sigue segundo en la clasificación por décima jornada consecutiva.