La etapa no tuvo mayor historia que conocer el hueco que abrían en cada pedalada los escapadados con respecto a un pelotón en el que nadie quiso avivar el ritmo en ningún momento. Sólo a falta de media docena de kilómetros para la línea de meta el pelotón aceleró la marcha, pues cedía 34 minutos y con ello estaba fuera de control, que salvó por tan sólo 20 segundos.
En la parte final, los hermanos García Quesada hicieron valer su conocimiento del terreno para jugarse la victoria entre ellos, aunque con anterioridad lo había intentado Iñaki Isasi, pero sin éxito. El primero en arrancar fue Carlos, y Adolfo se pegó como una lapa para olvidarse de su parentesco y hacer valer su fuerza para ganar ese mano a mano a su hermano.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios