El baloncesto español no atraviesa su mejor momento a nivel internacional. La Familia no pasó de segunda ronda en la pasada Copa del Mundo, donde encima defendían el título logrado en 2019; y este año la NBA contará con la menor presencia de españoles en sus filas en las últimas 18 temporadas.

Sólo quedan en la mejor liga del planeta tres estrellas españolas: Ricky Rubio, Usman Garuba y Santi Aldama. Por eso mismo, la renovación del último de esos tres jugadores es una de las mejores noticias del año para el baloncesto patrio, que seguirá contando durante los próximos años con un gran exponente en la NBA.

Así lo anticipó su franquicia, los Memphis Grizzlies, este pasado lunes en sus canales oficiales. El equipo que vio nacer la leyenda de Pau Gasol, inducido al Salón de la Fama de la NBA este mismo año, anunció la extensión de contrato del ala-pívot español hasta 2025, consciente de la perla que tienen entre manos.

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El jugador canario de 22 años promedió la pasada campaña en la 'regular season' 9 puntos, 4.8 rebotes y 1.3 asistencias por partido con los Grizzlies, y sus actuaciones en la actual pretemporada que está a punto de acabar han sido de las más positivas en la franquicia asentada en el estado de Tennessee. 

De hecho, el español se estrenará en la nueva temporada de la NBA el miércoles contra los New Orleans Pelicans; partido en el que tendrá la primera oportunidad para demostrar su enorme potencial y capacidad de mejora. La NBA sigue apostando por él, y debe dar este año un paso adelante para madurar su juego y hacerse imprescindible.

Aldama, el último exponente de una familia dedicada por completo al baloncesto, fue elegido con el número 30 en la primera ronda del draft de 2021, y desde entonces ha disputado 109 partidos con los Grizzlies. La temporada pasada jugó 77 partidos y lució un 47 % en tiros de campo y un 35 % en tiros de tres, por lo que aún tiene mucho margen de mejora.