Qué bonita casualidad que el primer Mundial que disputó España, en 2015, fue contra Costa Rica, que acabó en empate, pero qué gratificante es ver lo que ha crecido España en estos ocho años.
La selección se decidió por un once para abrir el campo, para meter velocidad por fuera, para someter al rival y para acumular muchas jugadoras en área para finalizar esos centros laterales. Primeros treinta minutos que nos enseñan el hambre y las ganas que tiene España de conseguir algo importante en este Mundial.
Costa Rica se protegió, intentó aguantar y defender con su línea de 5 más 4 y dejando una punta libre por si podía sorprender a España con algún contragolpe, pero nada de eso ocurrió. El gran dominio de España podría haber generado una goleada mucho mayor, quedémonos con las buenas sensaciones y seamos conscientes de que a medida que avance el Mundial, los equipos nos exigirán mucho más.
Qué importante es empezar el Mundial ganando y mostrando que somos capaces de más
Qué importante es para España que Esther González vea puerta, que Aitana acabe siendo MVP, como la jugadora diferencial que es, que Alexia dispute sus primeros minutos y, sobre todo, qué importante es empezar este Mundial ganando y mostrando que somos capaces de mucho más.
Nos vemos en el siguiente partido. Abrazo de gol.
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