El Masters de Augusta dejó duras imágenes en esta edición, las del declive de la gran leyenda del deporte, el norteamericano Tiger Woods. El golfista cinco veces ganador del Masters se retiró antes del inicio de la jornada del domingo, después de que sus dolencias físicas y la lluvia frenaran su insaciable espíritu competitivo.

Woods sufrió demasiado en la extrema sesión de la tarde del sábado, en la que acumulaba seis sobre par tras siete hoyos, después de dos dobles bogeys consecutivos. Demasiada exigencia física, pese a que superó el corte por 23ª vez consecutiva, para un hombre que mostró una severa cojera.

Las imágenes mostraron al campeón más vulnerable, muy lastrado por la lluvia, el frío y las secuelas del grave accidente de tráfico de 2021, que a punto estuvo de costarle la vida.

El legendario golfista ha aclarado en varias ocasiones que, debido a las graves lesiones que sufrió en la pierna derecha en dicho accidente, su plan es jugar tan solo los grandes cada temporada. Además, Woods también trabaja en su torneo, el Génesis Invitational, y como guía deportivo de su hijo Charlie.

ya ha confesado que debido al accidente de coche que sufrió en Los Ángeles en febrero de 2021 y que casi le cuesta la amputación de su pierna derecha sólo tiene en mente jugar el mayor número de grandes posibles cada temporada, el Génesis Invitational, que ganó Jon Rahm hace dos meses, que es el torneo que Tiger impulsa y que quiere centrarse en su familia y en la tutela deportiva de su hijo Charlie.