Isaac Humphries se ha convertido en el primer jugador de baloncesto profesional de la liga australiana (NBL) en anunciar abiertamente que es gay, por lo que ha expresado un gran alivio al poder por fin "conciliar su sexualidad" con su "entorno" deportivo.

En un emotivo vídeo publicado este miércoles en sus redes sociales, Humphries, de 24 años y que milita en las filas del Melbourne United australiano, revelaba en el vestuario frente a sus compañeros que es gay, y admitía haber tomado la decisión tras "un período extremadamente oscuro" en el que incluso "intenté quitarme la vida".

"Estaba luchando mucho con mi sexualidad y aceptando el hecho de que soy gay", explica el jugador, antes de reconocer que era algo que "odiaba de mí mismo". "Pensé que no podía ser esta persona dentro de nuestro entorno", ha confesado el australiano, que también señaló que "formar parte de una comunidad llena de orgullo y felicidad" le había llevado a dar el paso, porque supuso "un despertar para mí", añadió.

"Puedes ser un gran jugador de baloncesto y ser gay. No tiene nada que ver con tu sexualidad (...) Solo quiero ser yo mismo", ha concluido Humphries, que se convierte así en el primer jugador de la NBL australiana en reconocer su homosexualidad, en uno de los escasos ejemplos en el mundo del baloncesto profesional.

En 2013, el jugador de la NBA Jason Collins fue el primer atleta profesional de una gran liga estadounidense en confesar su homosexualidad.

Por su parte, el pentacampeón olímpico e icono global de la natación, Ian Thorpe, también australiano, admitió en 2014 ser gay tras años desmintiendo los rumores.

El consejero delegado del Melbourne United, Nick Truelson, anunció a varios medios de comunicación australianos que "todo el club está orgulloso de él". "Es un paso increíble en el viaje de Isaac", añadió Truelson.